El caos podría responder a una estrategia para alterar el resultado del proceso electoral, según algunos candidatos.

En un proceso electoral sin precedentes en la historia de Puerto Rico, parte de las votaciones primaristas que tenían que efectuarse ayer tuvieron que ser pospuestas para finales de esta semana luego de que cientos de miles de papeletas no fueran entregadas por la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) a 59 regiones electorales, levantando la sospecha de varios líderes políticos de la isla, quienes no dudaron en asegurar intenciones siniestras tras el incidente.

Una de las más vocales fue, sin duda, la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, quien tras salir de su centro de votación, en Cupey, enfiló sus cañones a la gobernadora Wanda Vázquez Garced.

"Wanda ha utilizado este proceso como simulacro de pillaje electoral", dijo, para también señalarla de querer robarle las elecciones a su contrincante, el precandidato penepé Pedro Pierluisi Urrutia.

"Wanda no puede encontrar suministros, no puede repartir el desempleo, le quiere robar a Pedro Pierluisi, pero más importante, le quiere robar al pueblo de Puerto Rico", sostuvo.

Por la misma línea fue uno de los contrincantes de Cruz Soto, Carlos "Charlie" Delgado Altieri, alcalde de Isabela y precandidato a la gobernación por el Partido Popular Democrático (PPD), que tildó el proceso como uno "viciado", y quien llamó "cómplices" a la gobernadora y al presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, al responsabilizarlos por la reciente aprobación de la Reforma Electoral.

"Aquí se violó la ley, la propia ley que establece este proceso que ha provocado todo esto, la que impulsó el PNP y Thomas Rivera Schatz", afirmó.

Thomas Rivera Schatz, por su parte, se ha mantenido ausente de las redes sociales, y, aunque pareció ayer más sosegado que en ocasiones anteriores, igual que otros colegas políticos, responsabilizó a la CEE durante sus apariciones públicas y fue uno de los que pidió la renuncia de Dávila Rivera.

"Falló en lo fácil", expresó el líder senatorial.

La gobernadora también exigió la renuncia de Dávila Rivera, pero también aprovechó para señalar a su rival primarista, Pedro Pierluisi Urrutia, por haber tenido contacto con Dávila Rivera durante el día y, contrario a exigirle la renuncia, haber querido continuar con el atropellado proceso.

“(Fue) un intervención indebida, como él ya nos tiene acostumbrados, a usurpar el poder”, dijo.

Pierluisi, por su lado, rechazó las imputaciones de Vázquez Garced, y condenó que se suspendieran las primarias tras un acuerdo entre la CEE, el PNP y el PPD.

“Jamás pensé que iba a tener que llevar acabo una conferencia de prensa como este o por este propósito. Es bien desafortunado y hasta bochornoso lo que pasó en el día de hoy. No existe disposición alguna en la resolución que permite que se haya tomado la decisión que se tomó. No hay base legal alguna para la suspensión de las primarias que se están llevando a cabo en el día de hoy o parte de estas primarias”, declaró en rueda de prensa.

Hasta el momento, no se ha concretado una fecha exacta dentro de esta semana para completar el proceso primarista, aunque se ha barajeado la posibilidad de que sean el próximo domingo y Delgado Altieri amenazara ayer en la noche con ir a los tribunales si hoy, lunes, a las 2:00 de la tarde, Wanda Vázquez Garced no firma una Orden Ejecutiva para que las elecciones sean mañana, martes.