El también excomisionado electoral del PNP tuvo varias quejas de parte de sus compañeros gerente en la agencia durante la incumbencia de Julia Keleher y también fue demandado.

Héctor Joaquín Sánchez Álvarez, quien hizo una controvertible transición de comisionado electoral del Partido Nuevo Progresista (PNP) a subsecretario asociado del Departamento de Educación (DE), ya tuvo quejas laborales por discrimen político, hostigamiento sexual y hostilidad hacia compañeros gerentes en esa agencia, además de al menos una demanda federal, cuando se desempeñó como Secretario Auxiliar de Educación Ocupacional y Técnica (SAEOT) durante el término de la exsecretaria, Julia B. Keleher, según documentos de personal a los que tuvo acceso NotiCel.

La secretaria designada al DE, Elba Aponte Santos, aceptó desde fines de diciembre en una entrevista con WIAC 740 que estaba evaluando el nombramiento de Sánchez Álvarez y la agencia confirmó que se reinstaló el sábado, 16 de enero, tras su servicio al PNP en la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) y recibió su nombramiento como subsecretario el 19 de enero.

Es la segunda ocasión en que la designación de Sánchez Álvarez a una posición de poder en el DE se discute en medio de la evaluación de un secretario de Educación. Sucedió también en junio de 2019 en el contexto de la evaluación del exsecretario, Eligio Hernández. En ese momento, se discutió una carta que consignaba que Hernández era uno de los que tenía conocimiento y había manejado las quejas laborales contra Sánchez Álvarez que culminaron en su destitución de la SAEOT por parte de Keleher. Pero Hernández minimizó la naturaleza de los problemas de Sánchez Álvarez en la agencia y éste compareció a favor del nombramiento de Hernández.

La secuela de la renuncia de Keleher, y la evaluación de Hernández, dejó claras las entradas políticas que Sánchez Álvarez tiene con la delegación legislativa novoprogresista. De hecho, se anunció como el testigo principal en una supuesta pesquisa contra Keleher que realizaría la Cámara de Representantes pero que no parece haber ocurrido o tenido resultados.

La confianza político partidista sobre el funcionario quedó cimentada el 25 de agosto cuando el entonces nuevo presidente del PNP, el hoy gobernador PedroR. Pierluisi Urrutia, lo presentó como nuevo comisionado electoral “por su amplio conocimiento y experiencia en el ámbito electoral”.

El equipo que Sánchez Álvarez integró con el legislador Edwin Mundo fue responsable de la estrategia de registro de votantes ausentes y adelantados que resultó en que 111,625 de las 175,532 solicitudes para esos tipos de votos en la CEE fueran de militantes del PNP. Esos 111,625 votos fueron el manantial electoral al que el PNP recurrió una y otra vez para ganar carreras que habían perdido con el voto presencial del 3 de noviembre, más notoriamente, la alcaldía de San Juan.

Con su nueva posición de confianza en la subsecretaría de la agencia, Sánchez Álvarez gana la facultad de influenciar sobre decenas de nombramientos de confianza en la agencia, abriendo la oportunidad para recrudecer el partidismo en esa dependencia que representa el presupuesto más grande del gobierno de Puerto Rico. “Donde el PNP ha atacado siempre para su botín político es el Departamento de Educación… Cuando vienes a ver (con los nombramientos de confianza) tienes una estructura política en una agencia de gobierno que ha estado en la mira federal por muchos años”, dijo el senador del Partido Popular Democrático (PPD), Ramón Ruiz, quien ha condicionado su voto a favor de Aponte Santos a que presente planes remediales para las escuelas del sur y ahora también a lo que suceda con la politización en la agencia tras la designación de Sánchez Álvarez.

“Ese es el error más grande que ha podido cometer la designada. En la historia de la educación, si tú buscas hacia atrás, nunca, nunca se había designado un activista político a una posición como la de Subsecretario de Educación. Y aquí todos los partidos hablaban de despolitizar el sistema educativo. Y entonces lo que hacemos es que llevamos figuras que van a politizar más el sistema”, reaccionó la expresidenta de la Asociación de Maestros, Aida Díaz, a quien la propia Aponte Santos sucedió en el cargo antes de ser designada Secretaria.

“Si el gobernador (Pierluisi) dijo que hay que erradicar la política de las agencias gubernamentales, hay otras agencias en las que el comisionado puede trabajar”, subrayó el senador Ruiz.

El excomisionado electoral, quien en su posición regular es maestro vocacional en la Miguel Such de San Juan, tuvo bajo Keleher quejas en su contra de parte de siete compañeros gerentes, de personal de una compañía privada y de la propia Keleher. Atacar personalmente a sus compañeros por diferencias profesionales, la animosidad en el trato personal, falta de prudencia, hacer comentarios sexuales, e intercambiar fotos explícitas, en el lugar de trabajo, realizar actos y comentarios de discrimen político y el elevar sus disputas laborales a la alta gerencia de la agencia sin primero hacer un esfuerzo para resolverlas con sus compañeros son algunas de las quejas contra Sánchez Álvarez según la información que pudo ver este diario digital.

“Es una persona muy volátil, no piensa”, indicó una fuente que coincidió en el grupo gerencial con Sánchez Álvarez y ahora está retirada.

Estas fueron algunas de las circunstancias que provocaron su destitución del puesto de confianza por parte de Keleher. Tras su destitución, y la consecuente reducción de salario, el funcionario recurrió al tribunal para obtener la protección de la Ley de Quiebras, principalmente por deudas de consumo, en agosto de 2019. Su plan de repago a los acreedores todavía está vigente y ha tenido ya dos impugnaciones por parte de acreedores por atrasarse o no cumplir con sus pagos. El exsenador, y convicto, Abel Nazario, fue la persona que empujó porque Sánchez Álvarez tuviera una posición de confianza con Keleher, quien enfrenta dos acusaciones federales.

En abril de 2020, la maestra Yolanda González Rodríguez presentó una demanda federal por violaciones de derechos civiles contra Keleher, Hernández, el exsecretario designado, Eleuterio Álamo, Sánchez Álvarez y otros, con alegaciones de que Sánchez Álvarez “orquestró” las violaciones y represalias que sufrió por sus discapacidades.

La secretaria designada, Aponte Santos, dijo ayer en La Fortaleza que no había discutido el nombramiento de Sánchez Álvarez con el Gobernador “porque yo soy la que tengo la autoridad de hacer el nombramiento”. “Evalué varios resumés, no estoy discriminando a nadie por asuntos políticos… yo asumo la responsabilidad”, reiteró. Defendió que “nuestro estilo de trabajo va a ser uno de apoyo a cada uno, fuera de líneas partidistas” y que si el subsecretario, que tiene 21 años en la agencia, no se atiene a ese estilo, recibiría su carta de destitución del puesto de confianza porque “tengo un banco de talentos en mis manos que he evaluado”.

Sánchez Álvarez no respondió una solicitud de NotiCel para obtener sus expresiones sobre estos hechos.