Muchas las familias puertorriqueñas en situación de fragilidad financiera
Estudio evalúa la situación económica de la población adulta de la Isla.
Una gran proporción de las familias puertorriqueñas se encuentran en una situación de fragilidad financiera, al no sentirse confiadas de poder absorber un gasto inesperado de $2,000, concluye un estudio realizado por FINRA Investor Education Foundation (Fundación FINRA), y distribuido aquí por el Centro para una Nueva Economía (CNE).
El estudio lo titulan “Panorama general de los factores relacionados con la capacidad financiera de los adultos en Puerto Rico” y sus resultados se fundamentan en una encuesta realizada entre octubre y diciembre de 2021 y basada en una muestra de 1,001 personas de 18 años o más que residían en Puerto Rico.
Entre sus principales hallazgos está que un 47% de las personas entrevistadas reportó estar en una situación de fragilidad financiera, lo que compara desfavorablemente con Estados Unidos, donde la cifra correspondiente es de un 30%.
Determinaron además que en Puerto Rico los entrevistados reportaron dificultades para administrar sus gastos diarios y son menos propensos a tener ahorros o inversiones. El informe muestra igualmente que existen grandes diferencias en la capacidad financiera por nivel educativo, por nivel de ingresos y por las transferencias intergeneracionales de riqueza.
El análisis y conclusiones se basan en un contexto social y económico de Puerto Rico donde la edad mediana de la población es de 44 años, seis años más alta que la mediana de EE. UU, y en el que “casi tres de cada cuatro adultos de 25 años o más” tienen menos de un título universitario de cuatro años (73%).
Con un ingreso medio familiar de $34,931 pero en el cual el 55% de los hogares tienen un ingreso anual inferior a $25,000. “Comparativamente, aproximadamente menos de uno de cada cinco hogares en el territorio continental de EE. UU. declara ingresos inferiores a $25,000”, resaltan.
Recuerdan también el dato de que aproximadamente el 43% de la población vive por debajo del nivel de pobreza, según la Oficina del Censo de Estados Unidos, 2021. Esto es “más del doble de aquellos estados con las tasas de pobreza más altas en EE. UU. continental”.
El estudio llega a varias conclusiones. Entre ellas se destaca que el 59% de los adultos de 18 a 29 años vive en estado de fragilidad financiera, frente al 47% de los de 30 a 54 años y el 41% de los mayores de 55 años. En términos de género, las mujeres tienen más probabilidades de vivir en estado de fragilidad financiera que los hombres (53% frente a 40%)
Establecen que en Puerto Rico, más de la mitad de los adultos con ingresos familiares inferiores a $25,000 vive en estado de fragilidad financiera (56%), una prevalencia superior a la de aquellos que ganan entre $25,000 y $50,000 (35%) y más de tres veces superior a la de aquellos que viven en hogares con ingresos de $50,000 o más (17%).
Otra de sus conclusiones es que la fragilidad financiera también está estrechamente relacionada con el nivel educativo y sostienen que “más de la mitad de los adultos sin un título universitario de cuatro años viven en estado de fragilidad financiera, frente a aproximadamente un tercio de los que cuentan con uno (51% a 34%).
Los índices de fragilidad financiera también son más bajos entre aquellos que esperan o han recibido transferencias intergeneracionales de riqueza de al menos $10,000 que aquellos que no.
Gastan más que lo que ganan
Otra dimensión que evaluaron fue la del gasto mensual de la familia puertorriqueña. Concluyen que el 39% de los encuestados reporta gastar más de lo que ingresan mensualmente, una tasa más de dos veces superior a la del territorio continental de EE. UU. (19%).
En Puerto Rico, gastar más de lo que se ingresa está mayormente vinculado a la edad, los ingresos y el nivel educativo. El 43% de los adultos de 18 a 29 años declara gastar más de lo que ingresan, un porcentaje mayor que entre los de 30 a 54 años (39%) o los de 55 años o más (38%). Menos hombres que mujeres gastan más de lo que ingresan (38% frente a 40%), aunque la diferencia es pequeña.
Afirman que la probabilidad de que los gastos superen los ingresos está estrechamente vinculada con el ingreso anual familiar. “El 45% de los adultos en hogares con ingresos inferiores a $25,000 gasta más de lo que ingresan, frente al 34% de los adultos de hogares con ingresos entre $25,000 y $50,000, y el 17% de los hogares con ingresos de $50,000 o más”.
La relación con el nivel educativo también la establecen y sostienen que el porcentaje de adultos en Puerto Rico que gastan más de lo que ingresan también varía según el nivel educativo. “Mientras que el 43% de los adultos sin título universitario gasta más de lo que ingresan, el 30% de los que tienen un título universitario reportan hacerlo.
Planificación económica
Por el lado de la planificación financiera y creación de riqueza, destacan que el 41%de los adultos en Puerto Rico reporta tener ahorros para emergencias, una fracción más baja que en EE. UU. continental, donde el 53% las tienen.
Nuevamente, los factores más vinculados con los ahorros para emergencias incluyen el nivel educativo y los ingresos familiares y los adultos jóvenes tienen la menor probabilidad de reportar ahorros para emergencias.
Por otro lado solo el 35% de los adultos en Puerto Rico reporta ser titular de una cuenta de retiro, sea a través del empleo o independiente, también “una cifra considerablemente inferior a la del territorio continental de EE. UU., donde el 57% reportan tener una .
Propiedad de vivienda
Apenas la mitad de los adultos en Puerto Rico reporta ser propietario de vivienda (50%) y la edad es el factor demográfico más vinculado a la propiedad de vivienda, ya que sólo el 21% de los adultos jóvenes es propietario de vivienda.
“Los adultos de 18 a 29 años tienen la mitad de las probabilidades de ser propietarios de vivienda que los de 30 a 54 años (48%), y tres veces menos que los de 55 años o más (66%). Las mujeres tienen ligeramente más probabilidades que los hombres de reportar ser propietarias de vivienda (51% frente a 49%).
Resumen sus conclusiones al expresar que “muchos en Puerto Rico enfrentan fragilidad financiera y tienen dificultades manejando los gastos diarios. Pocos han ahorrado o tienen inversiones propias, probablemente, en parte, en función de las grandes desigualdades de ingresos y nivel educativo. Como resultado, los habitantes de Puerto Rico reportan un bienestar financiero inferior que los del territorio continental de EE. UU” .
El CNE precisó por su parte que el informe fue preparado por Harold J. Toro, que este año regresó a la entidad como director de Investigación, y Olivia Valdés, investigadora senior de la Fundación FINRA.
Toro explicó que “el informe es un comienzo prometedor de la investigación que urge para profundizar en el análisis de la relación entre la dinámica generacional, la educación y la creación de riqueza en Puerto Rico, temas críticos para el diseño de política pública para propulsar la movilidad social y la prosperidad económica”.
“Desde que se lanzó por primera vez, el National Financial Capability Study (Estudio Nacional de Capacidad Financiera) ha aportado información importante sobre la capacidad financiera de los adultos a lo largo y ancho de Estados Unidos”, dijo en declaraciones escritas Gerri Walsh, presidenta de la Fundación FINRA.
“En 2021, ampliamos el alcance del estudio para incluir a Puerto Rico. La falta de información sobre la capacidad financiera de los hogares puertorriqueños en medio de los difíciles acontecimientos económicos que han tenido lugar en los últimos años sirvió como impulso para explorar las experiencias financieras de los puertorriqueños en la actualidad. También tenemos planificado examinar cómo evolucionan sus experiencias en los próximos años”, declaró.