Disputa en sector turístico por necesidad de un local o no para ventas de viajes
Para el presidente de Viajes Soler, el ejecutivo Iván Soler, se necesita un espacio físico para cumplir con la labor, mientras que otras organizaciones aseguran que la Isla no puede cerrarse a una “realidad global”.
¿Qué prefiere usted? Acudir a una agencia de viajes para comprar pasajes de avión, reservar un hotel o mirar las opciones de destino y pagar, o simplemente realizar la misma gestión a través de Internet. La respuesta, quizás, podría ser fácil, pero no para el sector turístico, que mantiene diferencias en torno al asunto.
Para el presidente de la Sociedad Americana de Agentes de Viajes y de Agencia Soler, el ejecutivo Iván Soler, hay una necesidad de un espacio físico para desempeñarse como agente de viajes “para salvaguardar” al consumidor.
“Es necesario un local, un espacio abierto al público, para esas personas que quieren hacer una reservación y mirar alternativas, pero sobre todo también para que el consumidor tenga donde pagar, ya que muchos no tienen tarjetas de crédito y en las agencias de viajes lo pueden hacer”, apuntó.
En definitiva, según Soler, quien dijo representar a varias agencias que tienen la misma postura, esta opción “ofrece seguridad al consumidor”, quien tiene “un lugar para venir a reclamar y con quien hablar”.
Por eso, el portavoz de la agrupación pidió que esta condición fuera incluida en el proyecto de la Cámara 1401, que se evalúa en la Comisión de Turismo de la Cámara.
Otra visión, totalmente opuesta fue la que expresó Daphne Barbeito, presidenta de la Alianza Turística de Puerto Rico, quien pidió a la legislatura “ser cautelosa a todo intento de grandes intereses de aplastar a las pequeñas agencias con requisitos del siglo 20”.
“Detractores dirán sobre la teoría de la necesidad de tener un local u oficina, ya que eso le daría una mayor protección al consumidor, disque porque podrían saber dónde conseguir al dueño de la agencia. Es ese el pensamiento de unos pocos que les preocupa más su bolsillo que el hacer la actividad de consultor de viajes una más robusta y pertinente”, aseveró.
Y arremetió al recordar que “todas las empresas que han cerrado o quebrado, dejando varados a cientos de pasajeros localmente, y que atentaron en contra de la reputación de todos, han tenido un espacio comercial y eso no ha sido garantía de nada”.
Concedió, sin embargo, que “aquellas agencias de viajes con volúmenes de venta grandes, y que por el propio modelo de negocio necesitarán tener un local, pues que lo tenga, pero eso debe ser discrecional para el dueño del negocio”.
Reforzó la postura de Barbeito la representante de Viajes Caribe, Eileen Ochart, quien aseguró que “el mundo digital explotó. Ha roto el paradigma con los consumidores por el acceso a la información, que es mucho más sencillo”.
Ochart consideró que con las posturas como la de Soler “se está impidiendo que crezca la industria… Hoy ya no se presentan documentos, todo se envía por correo electrónico. La comunicación ha cambiado, los clientes han cambiado. La juventud no sabe ni qué es una agencia de viajes. No podemos serranos a una realidad global, mundial”.