Muy prematuro estimar el impacto del coronavirus en la economía
Economistas plantean que el turismo recibirá el mayor golpe económico del COVID-19 en Puerto Rico.
Cuando la isla apenas se encaminaba a completar las primeras dos semanas de encierro por la pandemia del coronavirus, enfrentó una súbita desaceleración económica de unos $5,800 millones, estimó la firma de consultoría Estudios Técnicos.
Esa cifra no se distancia mucho del estimado presentado por la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal (AAFAF) quien prevé que el detrimento acumulativo del COVID-19 en la economía de Puerto Rico redundará en una pérdida de sobre $6,000 millones.
AAFAF dio a conocer el cálculo durante las vistas públicas celebradas por la Comisión de Hacienda del Senado sobre y la evaluación del Presupuesto para el Año Fiscal 2020-2021.
La agencia dividió las pérdidas en dos partidas: $800 millones durante el año fiscal 2020 y $5.8 mil millones en el año fiscal 2021.
A juicio del economista Elías Gutiérrez, todavía es muy prematuro pasar factura sobre el impacto de la crisis causada por la pandemia del COVID-19.
"Aún estamos en 'lockdown'. Los estimados que he visto solamente toman en consideración el primer mes del confinamiento. Habrá que esperar para hacer unas aproximaciones más certeras", expresó Gutiérrez.
"Me parece que a ciencia cierta, a nivel económico nadie sabe lo que está pasando", añadió Gutiérrez.
Los economistas José Caraballo Cueto y Heidi Calero coincidieron con el planteamiento de Gutiérrez, pero de antemano entienden que los estimados presentados por Estudios Técnicos y AAFAF son muy conservadores.
Todos cuestionaron los supuestos que fueron utilizados para llegar a ese estimado.
"Hace falta conocer más determinantes y saber hasta cuándo realmente estaremos en cuarentena", dijo Caraballo Cueto y estimó que el impacto económico del coronavirus en Puerto Rico fluctúa entre $6,000 a $12,000 millones.
"No hay estadísticas realmente confiables en estos momentos y ese es un problema que venimos arrastrando desde antes de la pandemia", dijo la economista Heidi Calero quien estimó que un 30 por ciento de la población se vio forzada a solicitar desempleo.
Caraballo Cueto adelantó que parte de esos empleados podrían no regresar a su trabajo, ya que las empresas en la isla se encuentran en un cambio tecnológico.
"Con la imposición de la tecnología, las empresas han descubierto formas más eficientes de llevar a cabo sus trabajos. Hay empresas de servicios que ya se irán permanentemente a trabajar remoto. Esto también impactaría a la industria de alquiler y bienes raíces", dijo.
Por otro lado, Calero mencionó que las empresas de telecomunicaciones, la industria y distribución de alimentos y todo lo relacionado a los servicios a través de aplicaciones móviles fueron los grandes ganadores. También mencionó que habrá un resurgir en las empresas de fumigación, servicios de entrega y equipos tecnológicos.
Urge un plan de recuperación económica
Además de establecer un plan para la reapertura de los comercios, Calero planteó que el Task Force Económico debería concentrar sus esfuerzos en identificar oportunidades de crecimiento bajo la nueva realidad cotidiana del mortal virus.
"A nivel mundial esto claramente impacta el sector de salud. Aquí en Puerto Rico tenemos un modelo de manufactura en farmacia bien exitoso. La mano de obra y el conocimiento está", comentó Calero.
"Esta es la única forma que podríamos salir de la gran pérdida dejada por el COVID-19, sobre todo en el turismo", reiteró.
Ambos hicieron la salvedad de que la recuperación en la economía está sujeta a la entrada de los fondos $20 mil millones en fondos federales, a raíz de los huracanes Irma y María.
Si bien el embate de los huracanes representó un escollo económico para las empresas de seguros, los economistas delinearon que durante la pandemia los sectores más afectados han sido la industria de turismo y entretenimiento.
El Gobierno Federal desembolsó $2.2 mil millones mediante la ley conocida como Coronavirus Aid, Relief, and Economic Security (CARES).
Mediante Orden Ejecutiva, la gobernadora Wanda Vázquez Garced destinó la mayoría de los fondos destinados a la compra de pruebas y equipo médico y brindarle liquidez al Fondo de Desempleo del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos (DTRH).
Además, Vázquez designó $485,625,863.80 al Fondo General y a la Reserva de Emergencia para gastos futuros y reembolsos.
Para el próximo año fiscal, AAFAF presupuesto propuesto para el Año Fiscal 2021 que asciende los $17,124 millones. De estos, $9,062 millones son con cargo al fondo General y $8,062 para Fondos de ingresos Especiales (SRF).
La Junta de Control Fiscal (JCF) por su parte delineó un presupuesto de $15,618 lo que conlleva un ajuste de $1,506 millones menos, en comparación al propuesto brindado por el gobierno.
El ente federal realizará su decimoctava reunión pública el próximo miércoles, 27 de mayo, para considerar la certificación del Plan Fiscal.