Lil' Wayne y Mayweather Jr. entre morosos famosos
Para todo lo que hablan, son sendos mala paga. Todos saben lo mucho que habla el boxeador Floyd Mayweather, jr. sobre la 'tolta' que le sobra y basta con oír una de las canciones del rapero Lil Wayne para entender cómo este bota dinero con su estilo de vida de 'blin blin', pero...
Ni Maywaeather, Jr., ni Lil Wayne son extraños en el Internal Revenue Service (IRS) y ahora ambos tendrán que hacer otro cheque.
Lil Wayne debe $5.6 millones, según el embargo radicado en contra de su mansión de Miami por el IRS, reportó el diario Detroit News. La mansión, con vista a la bahía y muelle propio, está a la venta por poco menos de $13 millones, y si encuentra comprador, los federales le quitarán el dinero sin que el rapero conocido como ‘Weezy' vea un solo centavo. O quizás puede escribirles un cheque, tal y como hizo hace meses, cuando les pagó $1.3 millones.
Por otro lado, está Mayweather. El Detroit News reportó el pasado viernes que Mayweather enfrenta un ‘ticket' de $3.4 millones por impuestos sin pagar desde 2009. Los recargos del IRS llegan tres años después de que Mayweather acordara pagar al IRS $5.6 millones en impuestos que debía desde 2007.
El invicto boxeador, que gana millones de dólares por pelea, recientemente ha estado fanfarroneando en internet sobre el dinero que ha ganado apostando en juegos de la NBA.
'Hoy fue un buen día. Me tomó 24 minutos ganarme $40 mil en el juego de los Trailblazers de Portland', escribió en Twitter a finales de marzo. En febrero, también había ‘twitteado' sobre los miles de dólares que había ganado durante un juego de los Mavericks de Dallas y sobre otro de los Pistons de Detroit.
Los problemas con impuestos le llegan a Mayweather en medio de una tormenta de fechas legales. El 25 de abril, enfrenta una vista por agresión luego de un altercado con un guardia de seguridad del complejo donde vive, quien alega que Mayweather le pegó durante una discusión sobre autos estacionados afuera del hogar del púgil.
En marzo pasado, un juez federal se opuso a derrocar una demanda de difamación en su contra, radicada en 2009 por el púgil filipino Manny Pacquiao. En esa demanda se alega que 'Mayweather y otros emprendieron una travesía diseñada para destruir la carrera, la reputación, el honor y el legado de Pacquiao y poner en peligro su habilidad de ganar los más altos niveles de compensación'.
Pacquiao nunca dio positivo a anabólicos, pero en esta demanda de 2009 se reclama que Mayweather, su padre, su tío, el promotor Oscar De la Hoya y su empleado, Richard Schaefer, condujeron una campaña durante varias entrevistas para hacer pensar al público que lo había hecho.