Detallistas de gasolina solicitaron al Senado que se investigue el lavado de dinero en que incurren algunos gasolineros y que se establezcan unos márgenes de ganancia mínimos y máximos que no afecten al consumidor.

Ello para evitar que ocurra una situación similar a la de 2008 cuando 200 detallistas tuvieron que cerrar por no poder comprar gasolina tras el alto costo del crudo.

Juan Geraldo Colón, dueño de una estación de Barranquitas, denunció en vistas públicas de la Comisión de Asuntos del Consumidor que hay dueños de gasolineras obteniendo márgenes de ganancia de 2 centavos, pese a que están vendiendo el combustible por debajo del costo.

'El 2011 está siguiendo los pasos del 2008. Estamos levantando bandera porque a diferencia de 2008 la economía ahora está bien frágil. La situación ahora va a ser peor y van a cerrar permanentemente como 400', dijo el detallista.

'Nuestros reclamos es tratar de conseguir márgenes mínimos y máximos para evitar prácticas desleales y prácticas ilegales de lavado de dinero', agregó.

En términos similares se expresó el gasolinero Reinaldo Figueroa, quien dijo que la industria está 'sumamente inestable'.

'Somos una industria que está totalmente al garete y los bancos nos han dado la espalda', señaló.

De acuerdo con Figueroa, los mayoristas de forma ilegal están creando corporaciones para la distribución de productos y otras para vender gasolina lo que deja en desventaja a los detallistas que no pueden comprar su propio camión de gasolina que cuesta unos $31,000.

'Si no actuamos ahora a largo plazo el consumidor será el más afectado si se permite que se establezca un monopolio', sostuvo.