El tema de las deudas a los jugadores de las franquicias de voleibol Capitalinas y Patriotas de San Juan no llega a su fin. La investigación que buscaba identificar en que fueron utilizados los donativos otorgados por el Municipio de San Juan en ambos equipos será retomada según dijo la alcaldesa de la ciudad capital, Carmen Yulín Cruz Soto.

El paso de los huracanes Irma y María, retrasó toda esa gestión, pero no pasará por desapercibido. El equipo de las Capitalinas era administrado por James Arroyo, quien entró con las Capitalinas en el 2015, año que finalizaron subcampeonas en la Liga de Voleibol Superior Femenino (LVSF). Mientras, los Patriotas en la Liga de Voleibol Superior Masculino (LVSM) tenían como apoderado a Jose Torres, aunque la Alcaldesa detalló que 'el apoderado era la misma persona' refiriendose a Arroyo.

'(Queremos) comparar porque ya la Liga había terminado o estaba en proceso de terminar el cuadre que ellos tienen con lo que el apoderado tiene como cuadre para poder nosotros poder recibir esa información amigable, sino tendremos que mirar otras opciones', agregó Cruz Soto sin entrar en detalles de esas opciones.

La Alcaldesa precisó que ambas franquicias recibieron un donativo de $250 mil. La misma fue dividida en dos plazos. Las Capitalinas hicieron su regreso a la LVSF para el 2015, tienen una deuda de sobre $100 mil en salarios y los Patriotas, trasladados desde Lares previo a la campaña del 2016, se encuentra sobre los $80 mil.

Según dijo, rumores apuntaban que los atletas no estaban cobrando y decidió que, para el segundo donativo de los Patriotas, se especificará que era para cubrir el salario de los jugadores. Aquí fue cuando la División Legal entró acción, según cuentan recortes de prensa. De hecho, se indica que las Capitalinas habían recibido $500 mil además de la cifra antes mencionada.

'El equipo masculino, estoy segura que la segunda parte del donativo específicamente lo decía así. Ya habíamos notado que en algunas circunstancias estábamos oyendo rumores de atletas que nos decían 'Alcaldesa no nos están pagando'. Entonces, le decían que el Municipio no había pagado y eso no es cierto. Así que se incluyó e incluye como regla general pero cuando ha hecho en el pasado donativos para deportes se le pone esa cláusula', explicó Cruz Soto.

Una carta enviada por la Federación Puertorriqueña de Voleibol (FPV) y fechada para el 25 de julio de este año, comunicaba la destitución a Arroyo como apoderado del sexteto femenino debido a que no estuvo económicamente saludable, no administró de manera responsable ni cumplió con sus funciones fiscales y contractuales.

Particularmente, en el caso de las Capitalinas, Arroyo no solamente tiene deudas con las jugadoras, sino que tambien debe a la Junta de Directores de la LVSF una suma que tambien fue dividida en dos plazos según dijo el presidente de la FPV, Cesar Trabanco.

Esta deuda asciende a los $47 mil correspondiente al pago original de la franquicia de unos $100 mil. La administración de las Capitalinas pagó la cantidad de $50 mil para noviembre de 2015 y un año despues, debían someter su segundo pago, el cual no fue realizado. La Liga pudo cobrar unos $3 mil por la operación de la boletería de las Capitalinas en un partido que jugó como local en Caguas, así como de una transacción con las Leonas de Ponce.

Tanto Trabanco, como el primer vicepresidente y asesor legal de la FPV, Jose Marxuach indicaron que las deudas fueron certificadas para agosto y diciembre. Estas corresponden totalmente a los apoderados según estipula la constitución de la FPV y los contratos.

Los voleibolistas pueden acudir a los tribunales para buscar un remedio ante el impago. 'Nosotros certificamos las deudas como debe ser una federación para que ellos (jugadores) vayan a cobrar las deudas. Certificamos las deudas de todos los jugadores, femenino y masculino y solamente hay una demanda radicada', dijo Marxuach.