No lo tomen a mal. Alain De Vos, entrenador de la tenista puertorriqueña Mónica Puig, está contento por lo bien que está luciendo su pupila ante las 'cocorotas' del tenis mejor pagado del mundo. Pero…

'Tenemos que seguir empujando. Yo no estoy conforme. Ella, más que nadie, no está contenta. Nos falta y lo sabemos', expresó.

'No nos conformamos con esto. Ella no y yo tampoco. Vamos a seguir empujando', dijo De Vos desde París, en conversación telefónica con NotiCel, apenas un par de horas después de que su Puig fuese eliminada del Abierto de Francia ante la española Carla Suárez Navarro.

'A Mónica no le gusta perder. Es que para estar en este nivel, a nadie puede gustarle perder. Mónica acabó, fue al ‘antidoping' y fuimos a comer. Y allí hicimos un ‘briefing' más o menos. Puede que haya alegría por lo que esté pasando, pero nosotros estamos en ‘work-mode'', agregó.

En el ‘briefing' se habló largo y tendido sobre la derrota 6-4, 7-5 que sacó a Puig de la contienda en Roland Garros, 'se habló de lo que funcionó y no funcionó'.

'Qué no funcionó? Pues jugamos demasiado recto. Había que abrir más la cancha. También la otra jugadora nos neutralizó. Hay que darle mucho crédito. Jugó muy, muy bien. Suárez Navarro estaba 20, después de este torneo debe subir a 14. Pero en arcilla yo entiendo que estábamos frente a una de las mejores dos ó tres jugadoras de tierra del mundo. Y le jugamos bien, muy bien. Pero uno solo puede controlar lo que uno hace, no lo del rival', explicó.

De Vos recordó varias instancias del partido en el que a Suárez Navarro 'la tuvimos ahí'. Por ejemplo, en el primer set y con el marcador empate, 4-4, 'y con la pelota en ventaja de ella, tenían una bola bastante fácil, pensó un poco y la tiró en la red' para que la española tomara ventaja, 5-4.

'En el segundo set, arrancamos 2-0 arriba. Suárez Navarro se puso más agresiva y se fue arriba 3-2, pero nosotros regresamos y Mónica estuvo 5-4, a punto de ganar', recordó De Vos.

'Pero por eso es que te digo que uno no puede controlar lo que hace la otra jugadora. Subió su nivel, es una de las mejores, regresó, empató, hizo el sexto punto y con su experiencia hizo el del triunfo. Eso fue todo'.

En cuanto a 'lo que funcionó', De Vos dijo que 'hubo agresividad, hubo constancia'. Recalcó, máue nada, que 'Mónica está aprendiendo mucho sobre su juego. Maduró como atleta en este torneo'.

'Por ejemplo, las derrotas ella no las asimila bien, pero hoy fue muy elocuente en analizar el torneo. Ha sacado mucho positivo del partido de hoy y eso es lo que importa, demostró mucha madurez', acotó.

'Mucha madurez como, en eso es que estamos. Mónica entrando a una buena etapa como tenista. Hay que recordar que ya el tenis femenino no es como en los noventa, cuando se podía dominar siendo una adolecente, como lo hicieron Martina Hingis o Jennifer Capriati. Desde cuándo no ves una ‘teenager' ganar un ‘Grand Slam'? El nivel está bien alto', dijo.

O sea, como dijo De Vos con tono de sargento de ejército, 'hay que empujar, hay que seguir empujando'.

'Yo le dije hoy: ‘Como entrenador estoy muy orgulloso de ti, pero hay que mejorar.'. Si no, nos quedamos donde estamos y hay que poner mucho trabajo aún. Le dije: ‘Incluso, si hubieses ganado el torneo, celebra poco, porque hay trabajo todavía. Y mucho'', disparó el ‘coach', señalando que Puig ahora hará un torneo menor la semana entrante en Marsellas 'porque quiero probar a Mónica con una simulación de dos semanas de alto rendimiento, como si hubiese ganado y siguiera a la próxima ronda en Roland Garros'.

'Luego, viene un entrenamiento intensivo en cancha de césped, durante varias semanas y por eso no vamos a los torneos de Birmingham, Inglaterra, ni de Rosmalen, en Holanda. El 10 de julio empezamos a prepararnos bien, hacemos el torneo de Eastbourne el 17 y luego vamos a Wimbledon el 24 de julio, donde por vez primera jugará en el cuadro como clasificada', dijo en perfecto castellano el ‘coach' De Vos, de origen belga y criado en España.

'Es que apenas acabamos de empezar', resumió.