Está comprobado que dejar de fumar es uno de las metas más difíciles de cumplir. Sin embargo, existen distintos metodos que están científicamente probados que son de gran ayuda para este proceso. Aquí te los enumeramos:

1. Remplazo de nicotina: esta categoría incluye los inhaladores, sprays nasales, gomas de mascar y parches que contienen nicotina y que ayudan a ir dejando el consumo del cigarrillo. Según reseñó el portal de CNN, en un estudio que incluyó más de 150 exámenes diferentes de estos productos y que se realizó a más de 50,000 personas, se demostró que la probabilidad de que se deje de fumar utilizando alguno de estos productos se incrementa de un 50 a un 70 por ciento. El estudio advierte que los fumadores crónicos pueden necesitar una dosis más alta y no menciona a ninguno en específico como el más efectivo.

2. Medicamentos recetados: tienes la opción de hablar con tu médico para ver si recomienda que tomes algún tipo de medicina que van directamente a los receptores de nicotina en tu cerebro. Es decir, al consumirla, no obtienes tanto placer al fumar y te ayuda a reducir las molestias que aparecen al momento de dejar el cigarrillo.

3. Cigarrillos electrónicos: En 2014, la revista británica The Lancet publicó los hallazgos de un estudio relacionados con este nuevo producto. Según información recogida por CNN, de las 657 personas que trataron de dejar el cigarrillo en un periodo de seis meses, un 7.3 por ciento lo abandonó gracias a este método. Esta práctica fue regulada hace poco en la Isla, para impedir que menores de edad tuvieran acceso al producto.

4. Prácticas de mente-cuerpo: algunos estudios han analizado la yoga y la meditación como alternativas para ayudar a abandonar el hábito. Según reseña la Sociedad Americana del Cáncer, un estudio sugirió que las personas que participaron activamente en programas de ejercicios estructurados tuvieron más probabilidades de abandonar el hábito, aunque aún se realizan más investigaciones.

5. Acupuntura: aunque es un método que ha sido utilizado para abandonar el hábito, existe poca evidencia que muestre su eficacia, según la Sociedad Americana del Cáncer. Sin embargo, por lo general, quienes recurren a esta alternativa, son tratados detrás de la oreja.