Más que por el factor económico la salud oral en Puerto Rico está bastante deteriorada debido a un velo de miedo que recae sobre los profesionales dentales.

Son historias de terror que pasan de generación en generación en rechazo directo al dentista y el resto de los expertos en ese campo.

'Es una mezcla de ignorancia con desconocimiento. Son actitudes o miedos que en ocasiones le pasan los padres a sus hijos convirtiéndose en estadísticas altas de problemas orales', destacó la doctora Lydia López, investigadora de la Escuela de Medicina Dental del Recinto de Ciencias Médicas de la UPR.

La galena explicó que una salud oral saludable comienza desde los 'dientes de leche' y la atención que los padres le pongan a sus hijos. 'Tenemos casos de niños con caries y problemas periodontales con dientes de leche. No podemos esperar a que ocurran estos episodios porque marcan el futuro dental del paciente'.

López recordó que las enfermedades periodontales se basan en una higiene oral pobre cuando el individuo no se somete a limpiezas regulares para remover el sarro o calculo que se genera en los dientes. 'hasta los animales necesitan limpiezas y los veterinarios se las hacen', insistió.

Entre los problemas de salud que proliferan a raíz de una salud oral afectada figura la diabetes, condiciones cardiovasculares, riñón, respiratorias y se podría asociar en ocasiones con el cáncer.

'Las personas tiene que dejar atrás los miedos y evitar pasárselos a sus hijos. En mi práctica privada hay muchos que previenen a sus hijos con que ‘cuidado que te van a puyar'. No puede ser así. Todo está en la crianza. Tuve la oportunidad de ir a una comunidad en Sudáfrica bien pobre donde los niños no lloraban cuando se les trataban sus dientes. Tenemos que romper en Puerto Rico con los miedos aprendidos', destacó la experta.

Su mayor recomendación es el lavado tres veces al día o con cada comida de los dientes, la utilización de hilo dental y la visita, cada seis meses al profesional oral para limpieza.

Según Elaine Pagán, Dentista del Estado, existe una prevalencia alta de problemas con la salud oral en Puerto Rico por lo que se han contratado una batería de profesionales de la salud para visitar las escuelas públicas del país una vez inicie el curso escolar. Todo esto en un afán por orientar y ofrecer de primera instancia las técnicas de limpieza en el hogar.

Especificó que la salud oral está incluida en el plan médico del estado y no se necesita referido para los tratamientos por lo que 'no hay excusas' para acudir al dentista.

'Tenemos que combinar las visitas al profesional dental con la integración de un sistema de higiene oral y de nutrición adecuada en el hogar. En la medida en que se logre ese balance se promoverá la ingesta de frutas y vegetales en vez de carbohidratos y comidas azucaradas', agregó Pagán.

Insistió en que el problema en el país no es económico sino debido a una 'disparidad social' tras la desinformación.

'El Estado está activo orientando a los niños y los padres, pero no podemos recaer en ese esfuerzo solamente. Los padres tienen que adaptar estilos de vida saludables con sus hijos porque la salud oral es completamente prevenible', afirmó.

Dijo que los estudios reflejan que los niños de 0 a 6 años cuentan con una alta de prevalencia de problemas dentales provocando caries, por ejemplo, y que entre existe un por ciento entre el 40 y el 60 de los chiscos son de escuelas públicas.

'Esto no tiene que ver con el nivel de pobreza o desventaja en la familia es definitivamente falta de rutina oral saludable y la inclusión de un profesional regularmente. Nuestro deber recae en apoderar a los padres en los procesos de salud de sus hijos porque existe una percepción de que la escuela o el estado les van a resolver el problema'.

Con esto en mente y en vías de concienciación masiva el Colegio de Cirujanos Dentistas de PR, la Escuela de Medicina Dental de la UPR y Colgate unieron sus esfuerzos para impactar escuelas y comunidades con una unidad móvil a través de la campaña ‘Juntos por las Sonrisas de Puerto Rico en agosto'.