Se cuadruplica la tasa de embarazadas adictas a opioides
El índice de trastorno por consumo de opiáceos entre las mujeres que dan a luz se cuadruplicó durante el período de 15 años que finalizó en 2014, según un informe sobre morbilidad y mortalidad publicado el jueves por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC).
El uso de opioides, ya sea heroína o analgesicos recetados, durante el embarazo puede conducir a la muerte fetal, parto prematuro, síndrome de abstinencia neonatal y, en algunos casos, la muerte de la madre.
La directora de la División de Salud Reproductiva de los CDC, Dra. Wanda Barfield, espera que los datos incluidos en el nuevo informe proporcionen una 'base sólida para desarrollar y adaptar los esfuerzos de prevención y tratamiento'. Aunque el análisis solo tomó en cuenta la data de 30 estados, el informe ofrece un vistazo de un grupo especial dentro de las muchas caras de la epidemia de opioides en Estados Unidos.
Desde 1999 hasta 2014, la prevalencia nacional de diagnósticos de trastorno por uso de opiáceos entre las mujeres que dieron a luz en los hospitales aumentó un 333%, de 1.5 casos por cada 1,000 partos a 6.5. Esto equivale a un aumento promedio anual de 0.4 por 1,000 partos hospitalarios por año.
En 1999, la prevalencia del trastorno varió de 0.1 por 1,000 partos en el hospital en Iowa a 8.2 en Maryland. En 2014, la prevalencia varió de 0.7 en el Distrito de Columbia a 48.6 en Vermont. La prevalencia tambien superó 30 por 1,000 partos en el hospital en Virginia Occidental en 2014, mientras que en el extremo opuesto del espectro, Nebraska, tuvo la segunda tasa más baja en 1.2 por 1,000.
Durante el período de estudio, los aumentos de la tasa promedio en el trastorno fueron más bajos en California y Hawái, donde el crecimiento ascendió a menos de 0.1 casos por 1,000 partos cada año, y más alto en Maine, Nuevo Mexico, Vermont y Virginia Occidental, todos con un crecimiento anual de más de 2.5 casos de trastorno por uso de opioides diagnosticado por 1,000 partos.
A partir de julio, ocho estados requirieron que los profesionales de la salud examinaran la exposición prenatal a drogas cuando se sospecha, mientras que 24 estados y el Distrito de Columbia requieren que los profesionales informen el uso sospechoso entre mujeres embarazadas. Veintitres estados y D.C. consideran el uso de sustancias durante el embarazo como abuso infantil, y tres estados consideran que es motivo para admitir a una mujer involuntariamente en un hospital psiquiátrico.