La tecnología ha transformado cómo las personas de la tercera edad consumen, comparten y socializan en Puerto Rico, según parte de los hallazgos del la radiografía del consumidor en el 2019 presentada por la Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA) durante el 'Conference and Food Show' en el Centro de Convenciones de San Juan.

'Estamos ante un consumidor más abierto a la tecnología, socialmente está activo en las redes sociales. Hacen reviews (reseñas), preguntas; lo que ocurre es que hay es un desconocimiento de cómo utilizar las herramientas disponibles para compra de bienes a traves del internet', explicó Keissa Acevedo, miembro del Comite de Radiografía.

Otro hallazgos refleja que las personas mayores de 55 años están predispuestas a nuevas experiencias, sobre todo para mantenerse activos socialmente. Eso se ha notado en los concesionarios de comida preparada dentro de los supermercados, donde las personas pasan horas socializando con otros que van allí a comer.

'La muestra nos dice que la mayoría están solteros o viudos y andan en busca de compañía y de alguien que los escuche. En ese sentido, el reto como industria está en identificar y proveer experiencias de contacto de calidad para que estas personas vayan a socializar en los establecimientos', puntualizó Acevedo.

En esa misma línea validó un estudio de las generaciones que presentó la aseguradora MMM que detalló que las personas de la tercera edad están sexualmente activas y son seres sociales que tienen una agenda activa en restaurantes y lugares de entretenimiento.

'El viejito está en movimiento y cambiando', explicó Lara Montilla de MMM durante su presentación, al paso que añadió que esta data motivó a la aseguradora a incluir en sus ofrecimientos cubiertas para medicamentos que traten la disfunción erectil.

De la data interna que maneja MMM, especializada en planes de salud Medicare, encontró que las personas mayores están en búsqueda de experiencias pero sobre todo compañía. Un dato que resultó interesante es que cerca de un 30 por ciento dijo que pasa hambre, pero no porque no puede adquirir la comida sino que no tienen la facilidad de llegar, lo que abre la puerta para los nuevos servicios de entrega de alimentos al hogar. Además, un 65% de la población encuestada está dispuesta a recibir sus medicamentos en el hogar.

'Hay una predisposición a las nuevas tecnologías y a servicios que faciliten la vida. Lo vemos en la radiografía de este año cómo hay un aumento en que los nietos ayuden a estas personas a comprar sus alimentos por las plataformas digitales, pero todavía existe mucho desconocimiento de cómo usarlas', puntualizó Acevedo.

Otros datos apuntan que la mayoría posee un telefono inteligente y conexión al internet, que usa mayormente para entretenimiento. Comparado con los millennials solo pasa en promedio dos horas diarias conectado.