A su llegada ayer a Puerto Rico, el dirigente del equipo nacional de baloncesto, Paco Olmos, aseguró que sintió gran decepción por no poder ganar la medalla de oro.

La fanaticada del equipo nacional de baloncesto de Puerto Rico llegó al aeropuerto Luis Muñoz Marín, donde los 12 magníficos fueron recibidos luego de traer la medalla de plata a Puerto Rico.

Sin embargo, el dirigente Paco Olmos aseguró que la meta principal del equipo era traer el oro.

'Nosotros ayer (jueves) teníamos una grandísima decepción… Nosotros en Puerto Rico hablamos de dos objetivos, clasificar para el mundial y una vez clasificado al mundial, no luchar por una medalla sino luchar por el oro', admitió Olmos.

Olmos considera que una de las principales razones por la que sentían decepción, era porque los puertorriqueños tenían mucha esperanzas en ellos.

'Yo creo que sobretodo habíamos visto la gran fiebre que despierta este equipo en el país y queríamos ir por el oro, sino, no hubiéramos estado decepcionados', añadió.

Olmos aseguró que no es un problema dirigir y representar a Puerto Rico a pesar de ser español.

'Yo siempre lo he dicho, siento que soy de dónde trabajo. Estoy enteramente agradecido con Puerto Rico', puntualizó emocionado.

Expresó que anteriormente había dirigido equipos extranjeros pero ninguno con la fanaticada tan emotiva como la de la selección de Puerto Rico.

'Yo hasta ahora había entrenado equipos que tenían detrás una afición, pero dirigir un equipo que detrás tiene un país es lo más grande que puede sentir un entrenador y en este caso yo soy el entrenador', aseguró Olmos.

También expresó la admiración por el equipo y sus anteriores entrenadores porque son los que han ido inculcando las habilidades y los logros que tienen hasta el momento.