BSN 'Playoffs': Leones vs. Capitanes; Cangrejeros vs Mets (Análisis)
Esta noche arranca la postemporada del BSN. NotiCel te trae un análisis y aunque es usted, querido lector, el que toma su decisión final sobre quien cree que ganará, aquí más o menos le damos un 'la'.
Arecibo versus Ponce
En la Ciudad Señorial se vive un verdadero sueño. Tras un insólito receso, los Leones han regresado al Baloncesto Superior Nacional con canchas llenas todas las noches. La casa de ‘Pachín' vibra ante el esfuerzo magistral que ha hecho la tropa de Nelson Colón, comandada en cancha por Carlos Rivera, quien el año pasado ganó un campeonato con los Indios de Mayagüez y este año quiere repetir ese dulce sabor, y el importado Mike Harris, uno de los más mencionados para el galardón de Jugador Más Valioso de la temporada regular.
El trabuco de Ponce es inmenso y, más que nada, ha mantenido su consistencia desde que empezó la temporada. Harris (20.5 puntos por juego, 10.5 rebotes) entra a los ‘playoffs' como el mejor anotador y rebotero del torneo; y junto al otro importado, Ike Diogu (20.1 puntos por juego, 8.5 rebotes) sembraron terror debajo del canasto durante la segunda parte de la campaña regular.
En la pintura, cuentan con el respaldo de figuras como los delanteros Iván López y Chris Gaston. Jugadores como Manuel Fortuna y Pirulo Colón también se han caracterizado este año por ayudar en facetas defensivas y de rebotes en el juego de media cancha, lo que hace el trabajo más fácil en los rompimientos rápidos para Rivera y el ‘combo-guard' Mike Rosario, quien ya le ha cogido el piso al básquet físico del BSN y muchos le vaticinan una explosión ofensiva en la postemporada.
Los Leones promedian 86.4 puntos y 36.4 rebotes por partido. Su 51% en tiros de campo impresiona, y de tres tiran para un 33%, nada mal en una liga donde el escopetero anda choreto. En la serie entre Capitanes y Loenes, Ponce ganó tres de cuatro: primero se apuntó un triunfo vía paliza en el primer juego, 97-75; luego cayó ante los Capitanes, 101-94; y venció en los últimos dos, en su último juego de la campaña regular, 108-93 y 77-75.
En otras palabras y mirando sus atributos, decir que Ponce no es el favorito para ganar esta serie, más con su rabiosa fanaticada y la ventaja local, sería un error. Claro, hay que jugar mucho básquet para ganar y en su camino se encuentran los Capitanes de Arecibo, con tres campeonatos y cinco finales en los pasados seis años. Realmente, en este momento, los Capitanes son un misterio, más cuando en esta postemporada presentará muchas combinaciones de jugadores que nunca han podido usar.
Ya sea por lesiones, por jugadores participando en el baloncesto internacional o por suspensiones, el dirigente David Rosario nunca ha podido tener a su plantilla completa. Esto ha sido de experimento en experimento, y esta noche, en pleno inicio de postemporada, Rosario vuelve al laboratorio, al estrenar un refuerzo en las figura del ‘swingman' norteamericano D.J. Strawberry en un partido que también marca el debut este año del estelarísimo armador Andrés Rodríguez. Además, espera contar desde el jueves con el ala-pívot dominicano Jack Michael Martínez como refuerzo comunitario, quien en estos momentos resuelve un asunto de visado.
De esta forma los Capitanes dejan en libertad al versátil pero problemático delantero venezolano Windi Graterol, y al armador Tre Kelly, y traen a Strawberry (14.3 puntos por juego en Croacia), hijo del ex pelotero de Grandes Ligas Darryl Strawberry.
Strawberry trae atletismo y Martínez una intimidante presencia en la pintura y un juego físico que quizás le hace falta al ejército amarillo del norte. A ver cómo, junto al centro Peter John Ramos (16.1 puntos, 9.8 rebotes por juego), aguantan el empuje de Diogu y Harris. Espere de Danny Vassallo (18.9 puntos por juego) varias explosiones ofensivas, aunque Arecibo va a tener que defender bastante en ese último parcial para mantenerse con Ponce y eso al estelar alero de los Capitanes no le gusta mucho que digamos.
Santurce versus Guaynabo
Esto va a ser pura guapería. Son jugadores que se conocen bien, veteranos de mil campañas que no se dejan de nadie.
Ahí van de nuevo a la postemporada los que ustedes conocen… los Alex Falcón (Santurce), los Larry Ayuso (Guaynabo), los Christian Dalmau (Guaynabo), los Wilfredo Pagán (Santurce), los Danny Santiago (Guaynabo), los Luis Villafañe (Santurce), los Manuel Narváez (Santurce), los Johwen Villegas (Guaynabo). Aquí medio mundo ha jugado o hecho audicionado para la selección nacional, y eso, que no estamos contando a los asistentes Jerome Mincy (Guaynabo) y Rolando Hourruitiner (Santurce), ni al médico Luis Molinari ni al entrenador Víctor Vargas, ambos de los Mets, ni al apoderado Salvi Villela (Guaynabo), ex gerente general del combinado patrio.
Para colmo, a estas fanaticadas les gusta el gozo, se viven el baloncesto. Por ejemplo, en el último partido en el que se midieron ambos, el que ganó Guaynabo, 86-82, se repartieron faltas técnicas a granel, casi se forma un motín y en la primera mitad Larry Ayuso recibió un cantazo que le puso la calva a sangrar, a lo Abdullah the Butcher. Nada, sólo era otro día en la oficina para los muchachos.
Aquí los veteranos tendrán sus oportunidades de jugar a la ‘bronca boricua', pero el que gane la serie sea el que pueda desplegar mejor su artillería ofensiva. Es decir, el español Paco Olmos tendrá que acentuar aún más en sus pupilos su bestial énfasis en defensa que ha puesto a bailar con los mejores equipos ofensivos de la liga y que tiene a jóvenes como Alex Galindo (23 cortes de balón) y Javy González (22 cortes de balón) llevando su juego a otro nivel.
Galindo (16.2 puntos por partido, 39% de tres), por si acaso, se ha consagrado como el caballete y piedra angular de este nuevo esfuerzo de Angelo Medina por traer un campeonato a la ciudad cangrejera, ahora bajo la administración de su panita Carmen Yulín Cruz. Entre los misterios de Santurce, no obstante, está lo que pudiera traer a la mesa el veterano armador argentino Diego Ciorciaris, quien lleva varios días entrenando con el equipo y, de entrar, lo haría como refuerzo comunitario en sustitución del dominicano Edgar Sosa.
En Guaynabo, al igual que en cualquier equipo dónde juegue Ayuso, el dirigente Carlos Mario Rivera buscará el juego de las cortinas. Rivera tiene a Vilella gozando desde que llegó al coliseo Quijote Morales con poco menos de cuatro semanas por jugarse en la campaña regular. Allí tiene una sólida escuadra en todas las posiciones, la cual espera sea controlada por el libro con el retornante Dalmau.
Podrá la bestial artillería de los Mets burlar la fuerte defensa de Santurce? Si eso no sucede no dude en que el cangrejo siga con su flamenco hacia la segunda ronda.