La vista para confirmar el acuerdo y el plan de ajuste que alcanzó la Corporación del Fondo del Interes Apremiante (COFINA) podría ser una de las más extensas que ha llevado la jueza federal Laura Taylor Swain desde que comenzó a presidir las vistas de Título III en el 2017, con una agenda estimada a durar más de 12 horas.

Aunque los procedimientos están pautados a comenzar a las 9:30 de la mañana en el Tribunal Federal de Hato Rey, ya se ha convocado una protesta por el Frente Amplio por la Auditoria de la Deuda frente a ese edificio a las 7 de la mañana. La agenda de trabajo en el tribunal establece que la vista culminaría a las 5 de la tarde, con espacio para retomar labores el próximo día al mismo horario.

El primer asunto que Swain abordará será el acuerdo que alcanzaron los agentes de COFINA y el gobierno central para dividir la titularidad del IVU entre ambos. En lo que se ha catalogado como 'el acuerdo de COFINA', el entendido divide los recaudos del IVU de tal manera que 53.65% vaya al pago de la deuda de COFINA y 46.35% vaya al gobierno central para financiar servicios esenciales.

Ese acuerdo no solo supone ser la zapata sobre el cual se elaboró el plan de ajuste de deuda, sino que además prolonga la necesidad de una resolución final que declare si la estructura de COFINA es constitucional. De declararse inconstitucional, los acreedores de COFINA no tendrían derecho alguno sobre el IVU y pasarían a ser acreedores no asegurados.

La jueza Swain dedicó poco más de tres horas para escuchar argumentos a favor y en contra del acuerdo. La JCF presentaría testimonio de su directora ejecutiva, Natalie Jaresko, quien podrá ser contrainterrogada por tres objetores: PROSOL-UTIER, representado por Rolando Emmanuelli, SEIU-UAW, representada por el bufete Cohen, Weiss and Simon y el bonista Lawrence B. Dvores, representándose a sí mismo.

Un espacio de 60 minutos fue designado para comentarios del público, los cuales fueron seleccionados al azar por el tribunal, pero no han sido divulgados.

La segunda parte de la vista -estimada a durar más de 6 horas- se dedicará al plan de ajuste de deuda. Ese plan provee para un intercambio de bonos con intereses escalonados que aumentan cada año hasta el 2058.

Tanto Jaresko, como el asesor de Citi retenido por la JCF, David Brownstein, declararían a favor del plan de ajuste. Por su parte, PROSOL-UTIER se apresta a presentar como testigo al economista Jose Alameda, quien declarará en contra del propuesto plan. Swain tambien separó 60 minutos para comentarios del público.

El último asunto en agenda, concluida la aprobación del acuerdo y el plan de ajuste de COFINA, supone ser la resolución de una disputa relacionada al plan de ajuste. La misma concierne al Bank of New York Mellon, y los fondos de cobertura Whitebox y Ambac.