El Negociado de Energía devolvió por inoficiosa una solicitud que había hecho la AEE para que le autorizaran conversiones a gas natural y nuevas plantas de emergencia.

El operador privado de la red eléctrica, LUMA Energy LLC, será el responsable de desarrollar un plan para estabilizar el sistema de generación de energía eléctrica de la isla para evitar los 50 relevos de carga que proyectaron podrían ocurrir el próximo año debido a las deficiencias de generación.

Uno de esos relevos ocurrió anoche, cuando abonados de al menos cinco pueblos sufrieron un corte de servicio porque no había suficiente energía para satisfacer la demanda.

La decisión del Negociado de Energía (NE) de encargar este plan a LUMA surgió luego de que el operador hiciera observaciones sobre la fragilidad de la generación basándose en que el contrato que tienen con el gobierno los faculta a hacer "análisis y evaluación de riesgos" sobre la suficiencia de los recursos del sistema y para la planificación y priorización de los contratos y compras del área de generación.

En un caso separado, el NE le cortó el vuelo a la Autoridad de Energía Eléctrico (AEE) en su intento de enmendar, de manera expedita, el Plan Integrado de Recursos (PIR) que rige la planificación de proyectos en todo el sistema eléctrico. La AEE quería conseguir autorización para, en ocho años, convertir a gas natural cuatro unidades de generación de San Juan y reemplazar 11 unidades de emergencia, conocidas como "peaker units", que se activan solo cuando es necesario inyectar rápidamente más megavatios al sistema por falla en alguna de las plantas regulares.

La AEE se basó en la fragilidad del sistema para presentar estas medidas como unos puentes hacia lograr la meta de integrar fuentes de energía renovable al 100% para 2050, como dispone la política pública. Pero el NE adjudicó que el contrato de operación que tiene LUMA también le transfirió esa función de pedir cambios al PIR y devolvió las mociones a la AEE para que sea a través del operador privado que impulsen las enmiendas.

El resultado de las dos determinaciones que el NE emitió el miércoles es que recae completamente sobre LUMA tanto el plan inmediato para estabilizar el sistema de generación y evitar las proyecciones de apagones selectivos en 2023, así como también cualquier intento de enmendar el PIR para añadir proyectos en el mediano plazo que sirvan de puente a la integración de las fuentes de energía renovable.

En cuanto al plan para estabilizar el sistema, el NE no le estableció un plazo final a LUMA, pero los sometió a un programa de reportes de progreso cada dos semanas. La resolución del NE contempla que los costos de las medidas de estabilización puedan ser sufragados por la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA), pero también puede implicar costos nuevos que se pasan al abonado mediante aumento en la factura.

En sus mociones al NE y en una vista que hubo el martes, LUMA presentó tres alternativas de estabilización:

-El alquiler de dos barcazas que están disponibles ahora en el Caribe con generación a base de petróleo. Una costaría $95 millones y otra $12 millones.

-El alquiler o adquisición de dos unidades terrestres, una turbina usada para energizar de emergencia a Bahamas en 2019 después del impacto del huracán Dorian y otra nueva localizada actualmente en Texas que tarda 10 días en llegar y 11 en ser instalada. Cada opción serían $18 millones, pero la información que proveyó LUMA no indica si es precio de alquiler o compra.

-La construcción de nuevas plantas o la conversión de plantas existentes, como la que proponía la AEE en la solicitud que el NE devolvió. LUMA no ofrece estimados de costo para esto, pero la AEE había dicho en su solicitud que FEMA podía cubrir el costo de conversión.

El exsenador Ramón Luis Nieves Pérez, quien asesoró al Senado para la ley de política pública energética, dijo que miraba "con suspicacia" la "insistencia" que hay sobre proyectos intermedios, como la conversión de unidades a gas natural, porque pueden tardar hasta 10 años, lo que las pondría en funciones en 2032 cuando ya para 2050 se supone que no se usen combustibles fósiles para la generación porque la ley mandata 100% de energía renovable. Advirtió que estos proyectos a lo que pueden llevar es que se intente usar como excusa para eliminar esa meta que estableció la ley.

El análisis de suficiencia de generación que hizo LUMA toma en cuenta la edad de la plantas en operación, una tan vieja como 57 años, daños nuevos que les provocó el huracán Fiona (y que son adicionales a los que sufrieron con María) y que el programa de mantenimiento de las plantas se atrasó, por lo que toca sacar de servicio para mantenimiento a más plantas en menos tiempo de lo previsto.

Por otro lado, en un tema separado, el NE emitió también una orden ayer contra LUMA para que cese y desista "de cualquier práctica que impida que los clientes puedan presentar su objeción a facturas a través de llamada telefónica o a través del portal cibernético de LUMA". Esto, a raíz de una solicitud que hizo la semana pasada la la Oficina Independiente de Protección al Consumidor (OIPC) para que se investigaran las tácticas que usó el operador privado después del huracán Fiona para manejar las objeciones que los abonados presentaron a sus facturas.

La orden contra LUMA incluye que extiendan los términos que los abonados tienen para presentar objeciones por la misma cantidad de días en que no estuvieron recibiendo objeciones por teléfono o a través de su portal cibernético.

El NE designó al exjuez de apelaciones, Gerardo A. Flores, para realizar la investigación que pidió la OIPC.

Para ver la presentación de LUMA sobre opciones inmediatas de estabilización de generación, pulse aquí.

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