Log In


Reset Password
SAN JUAN WEATHER
Ahora

La importancia de recogernos

El 70% de las camas de cuidado intensivo estaban ocupadas ayer, un umbral de riesgo según algunos expertos en salud.

Pese a las restricciones, el chinchorreo continuaba a todo vapor en el área de Piñones, en Loíza, el pasado 19 de julio.
Foto: Nahira Montcourt

La isla arribó ayer al umbral del 70% de ocupación de las camas de cuidado intensivo en medio de una etapa de transmisión comunitaria sostenida del virus, que inició el mes pasado cuando empezaron a dispararse los números de personas contagiadas y de muertes.

Había 66 pacientes de COVID-19 en intensivo o un 10% y 409 pacientes con otras condiciones, según el tablero de datos del Departamento de Salud. En total, había 370 personas con el virus hospitalizadas a través del país. Quedaban 3,263 camas disponibles y otras 3,356 camas eran ocupadas por pacientes con otras condiciones.

Aunque algunos expertos como el oncólogo Fernando Cabanillas han advertido que el índice del 70% constituye una alarma, que requiere medidas radicales, ayer el secretario de Salud, Lorenzo González Feliciano descartó tomar medidas adicionales a las contempladas en la Orden Ejecutiva, que entró en vigor el sábado pasado y que se extiende hasta el 11 de septiembre. Esta directriz mantiene el toque de queda e impone nuevos límites de capacidad a los restaurantes, centros comerciales y otros espacios de comercio al detal. Prohíbe filas y exige el uso de la mascarilla so pena de una multa de $100.

“Todavía no estamos en un punto donde la utilización de los servicios médicos no es preocupante para propósitos del COVID”, afirmó González Feliciano. “Los hospitales están relativamente vacíos”, agregó.

Insistió en que el análisis para medir la capacidad hospitalaria requiere que se tomen en cuenta otras variables como el uso de ventiladores, que se mantenía en un 3% en los casos del virus, y el número total de camas cuyo uso se mantenía en un 53%. De un total de 758 ventiladores, ayer había 36 pacientes de COVID usando este aparato de asistencia respiratoria y otros 280 ocupados.

Ante el patrón de contagios y muertes de las pasadas semanas, médicos y expertos en salud consultados por NotiCel recomendaron adoptar con rigor metódico las medidas de prevención universal de uso de mascarilla, distanciamiento físico y continuo lavado de manos y desinfección de superficies. Recomendaron también quedarse en casa, solo salir del hogar para atender asuntos indispensables y evitar las reuniones en grupos.

Pero las sugerencias no quedaron ahí. Plantearon la necesidad urgente de iniciar una campaña educativa y abogaron para que el Gobierno divulgue información más detallada y menos técnica sobre la pandemia para que los ciudadanos puedan entender la magnitud de la situación.

¿Dónde estamos?

Hasta el 16 de agosto habían fallecido 390 personas por COVID en 161 días de pandemia (2.4 por día). El 83% de las muertes han ocurrido en pacientes hospitalizados y 10% en salas de emergencia, según un análisis de la demógrafa Judith Rodríguez y el doctor Ibrahim Pérez de los datos divulgados por Salud.

El dúo apuntó que el mes de julio concluyó con 90 muertes (2.9 por día), superando al mes de abril que hasta entonces se mantenía como el mes con mayor número de muertes con 84 o 2.8 por día. En los primeros 16 días del mes de agosto, se han registrado 114 fallecimientos. Esto representa un promedio de 7.1 muertes por día, un ritmo mayor que el de los meses de abril y julio. La semana del 10 al 16 de agosto ha sido la semana con el mayor número de fallecimientos (60) durante toda la crisis salubrista. Le siguen la semana 27 de julio al 2 de agosto con 46 y la semana 3 al 9 de agosto con 39.

Rodríguez y Pérez señalaron que la magnitud del repunte de casos positivos en la semana del 3 al 9 de agosto, todavía continúa recopilándose semanas más tarde por “la incapacidad del gobierno para mantener una contabilidad en tiempo real de los casos positivos a través de toda la pandemia”. La semana entre el 10 al 16 de agosto, aunque también incompleta, ya ha sobrepasado los 2,000 casos de contagios. Combinada con la semana del 3 al 9 de agosto, ambas forman el repunte más prolongado y cuantioso de la pandemia (4,223 casos en dos semanas consecutivas, promedio 302 casos por día), de acuerdo a su evaluación de los datos oficiales.

“El incumplimiento con el distanciamiento social, principal mecanismo protector antiCOVID-19, ha precipitado los repuntes de casos que hemos visto durante julio y agosto. Los mismos han venido forjándose y manifestándose aproximadamente desde el Día de los Padres”, señalaron Pérez y Rodríguez.

“Se añadieron subsiguientemente los múltiples días festivos y largos fines de semana de julio, y finalmente las caravanas políticas y las primarias de principios de agosto, todo lo cual ha contribuido a la propagación de los contagios”, abundaron.

Ayer, precisamente trascendió la noticia de que el exsecretario general del Partido Nuevo Progresista (PNP), Omar Negrón, ingresaba a una unidad de cuidado intensivo, luego de que la semana pasada comenzaron a aparecer casos de políticos de la palma contagiados con COVID-19.

La epidemióloga del Departamento de Salud, Jessica Irizarry Ramos, explicó que Puerto Rico entró en la fase de transmisión comunitaria desde mediados de julio debido a ese aumento exponencial de casos del virus.

“Esto significa que existen muchos casos en la población y que en algunos de ellos es difícil de identificar la fuente de exposición porque como hay tantos casos, esa exposición pudo haber ocurrido en cualquier lugar”, precisó en entrevista con este medio digital.

Por tal motivo, advirtió que al salir del hogar hay que prepararse y protegerse para minimizar el riesgo de exposición y evitar el contagio. También alertó sobre la dificultad para identificar los síntomas de esta enfermedad infecciosa a tiempo.

“Las personas comienzan a sentir síntomas que son parecidos a un síndrome gripal y quizás no lo relacionan con que es COVID y continúan sus actividades cotidianas… Es importante que en estos momentos, donde estamos en una transmisión comunitaria sostenida del COVID en el país, que si siente fiebre, tos, malestar general, dolor en el cuerpo, congestión nasal o dolor de garganta, actúe como si fuera COVID”, apuntó.

Partiendo de esa premisa, la persona debe mantenerse en su hogar aislada mientras identifica las alternativas para hacerse la prueba lo antes posible. De esta forma, detiene la cadena de transmisión y evita que otras personas se infecten.

“Cuando limitamos la movilidad de la población, la movilidad de las personas, en cierta medida estamos limitando la oportunidad de encontrarnos con una persona que tenga COVID”, dijo Irizarry Ramos.

El marco de tiempo

Ante la inquietud que sienten muchas personas al saber que han estado en contacto con alguien que tenía el virus, la epidemióloga aclaró que para contagiarse hay que compartir con esa persona durante el periodo infeccioso.

“Contacto cercano se define como la persona que pasó 15 minutos o más a menos de seis pies de distancia del caso positivo durante el periodo infeccioso sin tener una mascarilla”, apuntaló.

Ese periodo infeccioso se calcula desde que la persona comienza a tener síntomas. A partir de ese momento, se estiman las 48 horas previas a los síntomas hasta 10 días después de haberlos comenzado a sentir. Aunque esta es la regla general, existen algunas excepciones.

Por ejemplo, las personas con condiciones autoinmunes, según Irizarry Ramos, podrían ser contagiosas hasta 20 días. En el caso de las asintomáticas, el periodo infeccioso se calcula por la prueba molecular, cinco días antes de la prueba y 10 días días después. “El rastreador monitorea a ese contacto 14 días a partir de la última fecha de exposición, que es cuando estuvo por última vez con el caso positivo”, dijo la epidemióloga.

Turistas recorren el Viejo San Juan el pasado 2 de julio.
Foto: Nahira Montcourt

“Esos políticos que estuvieron en contacto con los legisladores que están dando positivo, que no tenían mascarilla, que estaban a menos de 6 pies y que estuvieron más de 15 minutos, esas personas tienen que considerar ponerse en aislamiento aunque no tengan síntomas y los más importante es ponerse en aislamiento”, alertó el neumólogo Luis Nieves Garrastegui, a través de un vídeo que colgó en sus redes sociales.

Contrario a la reacción inicial de hacerse la prueba inmediatamente, el galeno recomendó esperar cinco días para evitar obtener un resultado equivocado.

“Esa es la ventana que hay para que dé positivo o negativo, si se la hace antes de los 5 días puede ser negativa y no significa que no lo tiene. Lo que significa es que estaba incubándolo”, insistió. “Si desarrolla síntomas, for favor tiene que estar en aislamiento en espera de la prueba, aislamiento completo por 14 días en lo que aparece la prueba”, insistió.

Mirada integral

El doctor Jaime Claudio Villamil, fundador de la Coalición Sabiduría Coronavirus y profesor del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, respaldó una respuesta holística y solidaria a la pandemia. En esa línea, mencionó la necesidad realizar una campaña educativa dirigida a los jóvenes que mezcle los elementos del vértigo que puede causar el miedo al contagio, pero también con el placer y la “gozadera” que produce obrar bien. Esa campaña podría incorporar la imagen de un joven frente al féretro de su padre en contraste con la alegría de abrazarlo en vida.

Las estadísticas demuestran que las personas entre los 20 a los 59 años son las más que se infectan, pero las personas con las mayores probabilidades de morir tienen 60 años o más.

Claudio Villamil transformó el concepto del encerramiento por la idea del “recogimiento sabio”, que consiste en mantenerse aislado en el hogar, pero desde el conocimiento y la empatía. Ofreció como modelo a seguir el caso de Uruguay, donde la ciudadanía de forma voluntaria se distanció sin que el gobierno impusiera una cuarentena.

“La responsabilidad cívica es posible”, insistió.

Como los otros entrevistados acogió el trilogía de la salud (mascarilla, distanciamiento y lavado de manos), pero propuso repensar el cuidado en intensivo para permitirle a los pacientes algún contacto con su familia utilizando la tecnología. También propuso la música como alternativa para paliar la soledad de estos pacientes, que no reciben visitas por el nivel de contagio de la enfermedad.

“Hay que humanizar el acceso al paciente en intensivo”, machacó.

Las playas y balnearios permanecen abiertos, pero con ciertas restricciones.
Foto: Nahira Montcourt

Cerrar negocios no atiende el problema

El ingeniero Emilio Colón, miembro del "Task Force" Económico creado para asesorar a la gobernadora Wanda Vázquez Garced, recomendó fortalecer los aspectos de prevención y fiscalización de la respuesta gubernamental a la crisis salubrista.

No favoreció otro “lockdown” porque lastimaría aún más la ya maltrecha economía isleña, que lleva en recesión más de una década. Recordó que unas 100,000 ya perdieron sus empleos y que estimados del gobierno  señalan que un 30% de los comercios podrían cerrar permanentemente debido a la crisis económica que ha creado la pandemia. Pero reconoció que existen actividades más riesgosas que otras. La clave, a su juicio, está en las medidas para mitigar o disminuir ese riesgo de contagio.

“Los lugares cerrados, con aire acondicionado, tienen que tomar unas medidas cautelares mayores. Tienen que aumentar la entrada de aire fresco, minimizar la circulación de aire. Deben usar filtros o tratamiento ultravioleta para tratar con el virus entre otras”, apuntó Colón.

“El problema del repunte de los casos, según los datos que han circulado, ha sido precisamente por la conglomeración de personas, donde la gente se junta y ese tipo de actividad es la que se debe evitar o minimizar”, agregó.

Aseguró que limitar los comercios o cerrarlos no resuelve el problema de la conglomeración de personas porque éstas buscarán otro lugar donde reunirse. “Lo importante aquí es que si tienes que salir de la casa tienes que protegerse como si todo el mundo alrededor de uno estuviera contagiado y se tiene que proteger de ese contagio. La manera más efectiva es con las 3M: usar mascarillas, lavarse las manos frecuentemente y mantener la distancia. Ande con ‘handsanitizer’ para que pueda sanitizar las superficies que tocas con frecuencia”.

Señaló que estas recomendaciones no funcionan si no existen consecuencias para las personas que no siguen las reglas. Además, recomendó al gobierno facilitar el acceso a la información oficial para que los ciudadanos puedan tomar decisiones informadas y realizar una campaña de educación como ocurrió con el cinturón de seguridad, que ahora todo el mundo lo usa.

“La realidad es que si el mensaje estuviera llegando y hubiera consecuencias sobre el comportamiento no deseado probablemente no estaríamos en esta situación”, dijo.

Pierluisi responde

El excomisionado residente y candidato a la gobernación por el PNP aseguró que tomó medidas ante las preguntas que han surgido sobre un posible brote en su equipo de campaña y las críticas que recibió el presidente de la Cámara de Representantes, Carlos "Johnny" Méndez Núñez, por acudir a la reunión del Directorio del PNP la semana pasada, mientras esperaba por el resultado de la prueba de COVID-19, que resultó positivo.

“Nos hemos mantenido atentos a la salud de los compañeros legisladores y otros ciudadanos que han arrojado positivo al COVID-19. La pandemia no distingue personas, todos estamos expuestos y por ello tenemos que ser más cuidadosos y llevar a cabo todas las medidas de higiene necesarias. Mientras no haya tratamiento efectivo o vacuna, todos tenemos que poner de nuestra parte para combatir la propagación de este virus”, indicó en declaraciones escritas a este medio.

“En nuestra campaña estamos arreciando las precauciones y estamos constantemente haciendo las consultas médicas necesarias para proteger a nuestro equipo y a todos con los que interactuamos. Estamos llevando a cabo las recomendaciones salubristas que refieren al aislamiento a toda persona con un resultado positivo y al aislamiento preventivo a quienes pueden haber estado en contacto con alguien que arrojó positivo hasta tanto se hagan una prueba diagnóstica y ésta arroje un resultado negativo”, agregó.

Indicó que hasta nuevo aviso no realizará actividades que promuevan la aglomeración de personas y limitará las reuniones presenciales.