Aumentan los costos en fiestas municipales con pase de paloma de la Junta
Los presupuestos para eventos como las Fiestas de la Calle San Sebastián y las Fiestas Patronales de Mayagüez aumentaron, pero los alcaldes lo ven como una inversión económica.
Dos de las fiestas municipales de mayor proyección a principios de año, las de la Calle San Sebastián en San Juan y las Patronales en honor a la Virgen de la Candelaria en Mayagüez, tuvieron aumento de presupuesto marcado este año, pero los alcaldes lo justifican como una inversión económica y la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) no interviene porque los municipios no tienen planes fiscales, como el gobierno central.
El ofrecimiento artístico de las Fiestas de la Calle San Sebastián que acaban de terminar fue contratado al productor Francisco “Paco” López López mediante la corporación Arena B LLC a un costo total de $2,151,307. El año pasado, la oferta fue contratada a Fesisla, Inc., de la productora Leonor “Milly” Cangiano Rivera, por $1,185,880. De 2023 a 2024, el aumento en este renglón de producción artística fue de 81%.
En declaraciones a la prensa la semana pasada, el alcalde de San Juan, Miguel Romero Lugo, aseguró que el rendimiento que el ayuntamiento recibe por ese dinero es de $50 millones. “En términos de recaudo para el municipio, es una cosa increíble”, dijo a Metro. El estimado de $2 millones en gastos que ofreció el alcalde es similar al contrato por la cartelera de artistas, por lo que no estarían incluidos otros gastos que tiene el municipio, como guaguas para la transportación, guardias municipales y el recurso humano de sus propios empleados asignados a tareas especiales durante el evento.
La próxima fiesta de pueblo con proyección para toda la isla son las patronales de Mayagüez, que empiezan este viernes, 26 de enero, y se extienden hasta el 4 de febrero. La producción del evento, incluyendo artistas, seguridad, cámaras de seguridad y machinas de feria, está contratada a Madera Events & Entertainment LLC, de Víctor Ramón Madera Rivera, por $800,000.
El año pasado, el evento estuvo contratado a la misma empresa a un costo de $710,000, lo que resulta en un aumento de 13% entre 2023 y 2024. La cartelera este año está balanceada a favor del género urbano, con exponentes como Tempo, Cosculluela, Yovngchimi y Farruko.
El alcalde interino de Mayagüez, Jorge Luis Ramos Ruiz, dijo a NotiCel que tanto el año pasado como el actual, la producción del evento se abrió a subasta. Madera Rivera tiene contratados otros eventos que también van a subasta, así como que tiene un contrato con el municipio para servicios de producción de eventos menores en distintos sectores de la ciudad. Resaltó que, bajo el alcalde suspendido José Guillermo Rodríguez Rodríguez, la producción de los eventos era por contratación directa y no subasta.
El aumento en costos entre año y año es “por el cobro de los artistas y la gente exige artistas que se salen de las manos”. “El costo fuerte de lo que es la parte artística es que los artistas están cobrando demasiado”, comentó.
A preguntas de por qué los paga si cobran caro, el alcalde interino afirmó que porque tienen el rendimiento económico de que personas de toda la isla, y de afuera, visitan la ciudad en los días de las fiestas para ver a esos artistas. No ofreció cifras específicas, pero dijo que el economista José Israel Alameda Lozada está realizando para precisar el rendimiento económico que estas y otras fiestas tienen para la ciudad.
Ramos Ruiz, del Partido Popular Democrático, enfrenta primarias en su intención eleccionaria ya que la representante Jocelyne Rodríguez, aliada del alcalde suspendido, y René Marrero radicaron precandidaturas para la alcaldía de Mayagüez.
En el gobierno central, decisiones de este tipo estarían sujetas a revisión de la JSF por virtud del plan fiscal pero, justo el día que comenzaron las Fiestas de la Calle San Sebastián la semana pasada, el ente fiscal emitió una comunicación a comerciantes en las que comunican su decisión de quedarse fuera de la controversia sobre el nuevo Código de Orden Público de San Juan.
Aunque su expresión ocurrió en el marco de esa pugna específica entre el gobierno capitalino y los comerciantes, la implicación para todos lo municipios es que la Junta no se va a meter a evaluar la corrección de sus reglamentos u ordenanzas porque los municipios no tienen planes fiscales, como el gobierno central y otras de sus dependencias.
La Junta intentó un proyecto piloto para realizar planes fiscales en algunos municipios, pero lo abandonó.
“[E]n este momento, las ordenanzas municipales no están sujetas a la política (de revisión de leyes y reglamentos), en parte porque a los municipios actualmente no se les requiere preparar planes fiscales”, consignó en la carta el abogado principal de la Junta, Jaime El Koury, a la vez que adelantó que podrían tomar acción si entienden que una ordenanza, como el código de San Juan, “impide o derrota los propósitos de (la Ley) PROMESA”.