Mujer puertorriqueña que pasó por el mismo proceso, espera que la recién nacida encuentre el hogar que la vida a ella le regaló hace 47 años.

Muy pocas veces se ven escenas tan estremecedoras y tristes como esa.

Una recién nacida, alegadamente abandonada por su progenitora, y dejada a su suerte, aunque al menos, —y muy afortunadamente— en un hospital.

El miércoles, Puerto Rico se estremeció al recibir en horas de la mañana una noticia de esas, al reportarse que una mujer, residente en Nueva York y que andaba de vacaciones en la Isla, dio a luz a una niña en el Hospital Wilma N. Vázquez del pueblo de Vega Baja, y que luego de seis días del alumbramiento, se marchó de la institución dejando allí a la criatura.

Las lágrimas de muchas mujeres que no han tenido la bendición de la maternidad inundaron las redes con múltiples mensajes, algunos de tristeza y otros de esperanza.

Los números de lectoría de periódicos digitales como lo es NotiCel también se dispararon con el evento.

Hasta el cuadro telefónico del Wilma -según fuentes oficiales- se disparó con llamadas de personas dispuestas a tomar custodia de la niña.

Pero dentro de todo lo acontecido, un mensaje, directo y en privado, reveló y desempolvó una historia muy similar acontecida en el norte de Puerto Rico hace poco más de cuatro décadas y que afortunadamente hoy podemos decir que tuvo un final feliz.

“Esa fue mi historia hace 47 años en un hospital de Arecibo”, expresó entre lágrimas y en exclusiva para NotiCel, una mujer que hoy es una gran profesional de la salud y de la que también guardaremos su identidad por cuestión de privacidad. “Me abandonaron y estuve siete días en ese hospital”, continuó.

“(No fue ) Hasta que una enfermera del nursery que era prima de mi mamá llamó a mis papás. Y papi hizo hasta lo imposible para sacarme del hospital y llevarme a casa en lo que salían los trámites de adopción”, agregó.

La dama vive en el mismo municipio donde ocurrió este nuevo caso. Le tocó la vida. La hizo revivir y recordar. Pero a su vez descansa en una gran fe de que la niña dejada el miércoles 12 de abril de 2023, en ese nursery de un hospital vegabajeño -que hace apenas unos años reabrió su servicio de sala de parto- corra con la misma suerte que tuvo ella.

“Doy gracias a Dios por eso y espero que esa niña sea igual de bendecida como lo fui yo”, añadió nuestra entrevistada arropada en fe y esperanza.

El miércoles el Negociado de la Policía de Puerto Rico investigaba a la mujer que dejó la niña.

El hospital, que precisamente fundado hace más de cuatro décadas por los ginecólogos Dra. Eduarda Pabón y su esposo el Dr. Enrique Vázquez, y que se ha caracterizado históricamente por ser un centro muy solidario y responsable en casos tan sensibles como estos, anunció a través de su administrador José Talavera, que solicitará mantener la custodia de la menor para continuar ofreciéndole tratamiento.

La secretaria del Departamento de la Familia, Cieni Rodríguez, dijo que "los profesionales de trabajo social de la agencia recopilan información e investigan todos los ángulos. Al momento, la bebé continúa en el hospital recibiendo los servicios médicos para un infante de su edad".