Durante las vistas de transición, se reveló el aumento en la construcción en el renglón de las carreteras, y se explicó cómo es que se alcanzan esos fondos federales para repararlas.

En Puerto Rico no se ha reparado ni una sola escuela tras los terremotos en el sur, mientras que otras iniciativas de política pública —como la fusión de agencias y la reducción del tamaño del gobierno— continúan a medias. No obstante, la operación más constante y en incremento histórico ha sido la construcción de carreteras.

El dinero utilizado es una mezcla entre fondos estatales y federales, toda vez que este último condiciona su desembolso a que el estado de la carretera sea prácticamente deplorable, según el secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) estatal, Carlos M. Contreras Aponte.

Es decir, el círculo vicioso por los pasados años ha sido inyectar millones de dólares en la construcción de vías, pero no mantenerlas hasta que lleguen al punto que cualifican para asignarles fondos federales de reconstrucción.

“Las agencias federales no dan dinero para mantenimiento. El mantenimiento le toca al Estado. Por eso nuestros proyectos son de reconstrucción. El problema que tenemos en Puerto Rico es que somos muy buenos construyendo, pero no muy buenos manteniendo. Tengo que esperar a que la vía llegue a un nivel pésimo, para que entonces cualifique para reconstrucción”, declaró Contreras Aponte.

No obstante, Contreras Aponte aseguró que las carreteras están mejor al presente que cuando el Partido Nuevo Progresista (PNP) asumió el poder del gobierno en el 2017, a toda vez que reiteró que el DTOP es responsable de solo un 25%, porque son estatales. El cerca de 80% restante le corresponden a los municipios.

El primer paso de ese círculo vicioso, la inyección de una suma cuantiosa, ya se cumplió nuevamente tras finalizar el año fiscal 2020, cuando la Autoridad de Carreteras (ACT) alcanzó una inversión histórica de $279 millones en proyectos de construcción. Esta es la cifra más alta en los pasados diez años, aun cuando este año ha sido caracterizado por el impacto de terremotos y la pandemia del COVID-19.

En promedio, se desembolsaban más de $40 millones mensuales a proyectos de construcción de carreteras, sumado a las iniciativas de mejoras capitales.

“La ACT ha logrado implementar un programa de mejoras capitales sin precedentes en su historia reciente. El enfoque ha sido en la reconstrucción de la red vial y en el desarrollo de sistemas que optimicen su operación. La inversión total supera el billón de dólares”, indicó, por su parte, Rosana Aguilar Zapata, directora ejecutiva de la ACT.

En total, son $1,025,264,355, que se desglosan de la siguiente forma:

El proyecto DTL consiste en la construcción de dos carriles de las carreteras PR-52 y PR-18, desde las inmediaciones del Centro Médico, hasta la intersección de la PR-52 y PR-30 en Caguas. Según las proyecciones, comenzaría operaciones en enero de 2021.

Las cifras fueron divulgada durante la vistas de transición entre el gobierno saliente de Ricardo Rosselló Nevares—Wanda Vázquez Garced y el gobierno entrante de Pedro Pierluisi Urrutia. Pese al cambio de gobernante, Aguilar Zapata supone permanecerá en su cargo por invitación de Pierluisi Urrutia.

“Abriendo Caminos” es el programa de reconstrucción de carreteras más grande en la historia reciente de la ACT y comenzó este cuatrienio bajo Rosselló Nevares. Es en donde se han enmarcado estas renovaciones.

De acuerdo al Secretario del DTOP, la ACT “fue el líder” en levantar la industria de la construcción en Puerto Rico tras el paso de los huracanes Irma y María en el 2017. Mientras, Aguilar Zapata recomendó que se identificaran ingresos de un fondo recurrente para continuar destinándolo al mantenimiento de las carreteras que se han renovado.

El presidente del Comité de Transición del gobierno entrante, Ramón Luis Rivera Cruz, reiteró el compromiso de mantener las carreteras en el nuevo cuatrienio, que inicia el 2 de enero. El también alcalde de Bayamón subrayó que estos próximos cuatro años son “de urgencia” y de “acción”.

“Va a tomar tiempo la reparación de todas las carreteras de Puerto Rico porque fueron muchos años sin ser atendidas, en gran medida por la falta de dinero y llegó entonces la quiebra. No se puede ir al mercado de bonos, si no vas al mercado de bonos no puedes hacer obra pública, y encima de eso, entonces después si la naturaleza se ensaña contra esa infraestructura, como fue Irma, como fue María, pues es mayor”, explicó Rivera Cruz.

Cero presupuesto para ciertas áreas

En su ponencia, leída por la asesora legal Miriam Stegan Acta, el DTOP esbozó que no se le ha asignado presupuesto alguno a la Directoría de Obras Públicas, que es la responsable del mantenimiento y la conservación de las vías estatales y sus servidumbres a nivel Isla.

Algunas de las tareas que lleva a cabo esta oficina son el desyerbo y mantenimiento mecanizado de áreas verdes, tapado de hoyos (bacheo), repavimentación de segmentos de carreteras, marcado de pavimento, limpieza de obras pluviales, instalación de semáforos, y rotulación, instalación de vallas de seguridad y, finalmente, construcción de aceras y encintados.

“Para estas tareas se ha estimado y solicitado consistentemente en los presupuestos de este cuatrienio las siguientes cantidades aproximadas: Bacheo y repavimentación segmentada, $5,000,000; Desyerbo y limpieza mecanizada de servidumbre, unos $17,000,000; Reglamentación y señalización, $500,000. Sin embargo, la asignación de presupuestaria a sido de cero dólares. Para mitigar este deficit presupuestario, la Directoría de Obras Públicas ha trabajado con convenios colaborativos para llevar a cabo proyectos de impacto en las carreteras”, aseguró Stegan Acta.

Es a través de esas iniciativas que se logró el desyerbo de unos 27,000,000 de metros cuadrados y el deposito de unas 24,000 toneladas de asfalto, o 246,000 hoyos tapados.

Otra dependencia sin dinero son las directorías de urbanismo y desarrollo comunitario, responsables de la reactivación del movimiento económico en los cascos urbanos y velar, dirigir, coordinar e implementar todos los proyectos de infraestructura, el entorno, instalaciones recreativas y comunitarias del “Proyecto de los Mil Millones”, conforme a la Ley para el Desarrollo Integral de las Comunidades Especiales de Puerto Rico.

“Cabe destacar que desde el 30 de junio de 2017, fecha en que culminó el año fiscal y se terminaron los fondos asignados para proyectos en los municipios de la Isla, no se han asignado fondos adicionales. No obstante se pudo lograr la terminación sustancial del Proyecto Palmer Portal del Yunque, Rio Grande, en el cual se realizaron mejoras urbanas a la infraestructura eléctrica y a la comunidad Portal del ‘National Rainforest’”, según la ponencia, en referencia a los cascos urbanos.

La porción del desarrollo comunitario, por otra parte, no recibió presupuesto para continuar sus proyectos “debido a la actual situación fiscal”.

Mientras que el Secretario del DTOP aseguró que se marchará del cargo con gran satisfacción por cumplir sus tres promesas principales, durante la vista puntualizó sobre una de ellas por ser la iniciativa más emblemática y exitosa de la agencia hasta la fecha: la aplicación del Centros de Servicios al Conductor (CESCO).

A través de la aplicación, los ciudadanos pueden obtener los servicios de imprimir su licencia de vehículo de motor, reporte de multas, certificación de reporte del vehículo de motor, además de sacar citas, entre otros.

El próximo paso, según Contreras Aponte, es implementar la habilidad de hacer traspasos de vehículos de motor desde la aplicación y emitir boletos o multas de forma electrónica.

Las otras dos promesas del Secretario al juramentar a su cargo —y que al presente asegura fueron cumplidas— fueron mejorar la transportación desde y hasta las islas municipio de Vieques y Culebra y retomar el arreglo de las carreteras.