Secretarios del DRNA y DRD justifican tala de árboles en Cerro Gordo
Alcalde de Vega Alta desmiente la versión de los Secretarios e insiste en que fue una masacre ambiental.
La tala de cientos de árboles, palmas y arbustos en el Balneario de Cerro Gordo fue defendida por los secretarios del Departamento de Recreación y Deportes (DRD), Adriana Sánchez Parés, y del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Rafael Machargo Maldonado, quienes la catalogaron como una tarea pendiente de recogido de escombros tras el paso de los huracanes Irma y María.
Sin embargo, el alcalde de Vega Alta, Oscar “Can” Santiago Martínez y un grupo de expertos aseguraron que se derribaron más árboles de lo necesario. Según vecinos de la zona, el acto responde al desarrollo de un proyecto de viviendas.
A mediados de septiembre, vecinos de Vega Alta, Dorado y Vega Baja, denunciaron una alegada “masacre ambiental” en la vegetación del balneario y radicaron una demanda para detener el acto y exigir documentos y pruebas certificadas por profesionales que validaran la poda de los árboles.
Además de la demanda, la Cámara de Representantes citó a las partes para investigar el asunto mediante su Comisión de Agricultura, Recursos Naturales y Asuntos Ambientales, ante quienes Sánchez Parés reveló que originalmente se planificaban talar 14 árboles en el balneario de acuerdo a estimados de la empresa APTIM, lo que conllevarían unos seis millones de dólares.
El dinero provendría de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), que opera mediante reembolso, entidad que también estipula los requisitos para escoger los árboles que serían cortados.
No obstante, el número de árboles a talar ascendió a 1,100 cuando los trabajos fueron revisados por otra compañía, que a su vez requirió una enmienda al plan de trabajo ascendente a $39 millones adicionales.
“Desde junio hasta mayo de 2020, el Departamento de Recreación y Deportes y las compañías contratadas estuvieron enviando pruebas a FEMA de las decisiones. Las compañías que son contratadas cobran por árboles cortados correctamente, así que una compañía que corta 50 árboles que no tenía que cortar no va a cobrar por esos árboles”, expresó Sánchez Parés ante la comisión.
Aunque la necesidad de los trabajos surge tras los huracanes en septiembre de 2017, no empezaron hasta después de mayo de 2018, cuando llegaron los primeros fondos. La funcionaria describió que el DRD tenía a su cargo el recogido y la limpieza de escombros en esta y otras 300 instalaciones de la agencia, así como del Programa de Parque Nacionales.
Del 6 de julio hasta el 25 de septiembre, se había completado la totalidad de los trabajos en el área del balneario y el estacionamiento, pero faltaban árboles por cortar en veredas y otros espacios, de acuerdo a la funcionaria.
“El balneario de Cerro Gordo tiene 152 acres de terreno. Eso es gigantesco y es un área crítica para la zona, con una gran variedad de árboles”, describió Sánchez Parés, quien argumentó que los trabajos realizados comprenden menos del diez por ciento del parque.
Aunque los trabajos están casi completos, la Secretaria indicó a NotiCel que no se ha tramitado el proceso para solicitarle reembolso a FEMA por el corte.
La agencia federal aprobó el estimado original de 14, pero no ha evaluado la enmienda a 1,100. Sánchez Parés adelantó que no tiene dinero para cubrir los gastos de los árboles que no sean cubiertos por la agencia federal.
Compañías contratadas para esta tarea:
- DRC Emergency Services
- CERES Environmental
- Looks Great Services
- Debris Tech
También se supone que se siembren dos árboles por cada uno que es removido, acto que no es reembolsable por FEMA, pero eso tampoco ha comenzado.
Para el Secretario del DRNA, la atención a este tema es producto del “furor” de las elecciones y luego del 3 de noviembre dejará de ser preocupante.
Misma empresa para inspecciones y certificaciones
Sánchez Parés explicó que la determinación de qué árboles cortar proviene de arboristas —o expertos en la salud de los árboles—, quienes a su vez se basan en los requisitos impuestos por FEMA para cumplir con los parámetros del reembolso.
Aunque los arboristas son certificados por el DRNA, estos expertos fueron contratados por Debris Tech, la misma empresa que se utilizó para inspeccionar, certificar, talar y recoger árboles y escombros en los parques.
Del mismo modo, el DRNA no les solicitó permisos para Corte, Poda, Trasplante y Siembra de Árboles con tal de acelerar las labores.
“Están delegando todas sus funciones. Es como poner al cabro a velar las lechugas. Es un absurdo”, criticó el representante Rafael “Tatito” Hernández Montañez, quien adelantó a este diario que elevaría las denuncias a la Oficina del Inspector General porque el DRD y el DRNA no han cumplido con su deber ministerial.
El arborista Rodrigo Matta Salgado, empleado por una de las empresas, aseguró que si los árboles no sufrieron daños por los huracanes, no se cortaban. Del mismo modo, debían cumplir con los requisitos de FEMA, que son más restrictivos que los impuestos por el Estado:
- Árbol debe tener raíces expuestas
- Tener 30 grados inclinación
- Tener daños estructurales en el tronco
- Medir un mínimo de seis pulgadas
- En el caso de las podas: diámetro mayor a dos pulgadas que estén por caerse, enfermas o guindando en el área
“Se les procede a poner un sello que identifica si es poda, corte o especie en peligro de extinción. Una vez comenzamos la evaluación del árbol y se pone el sello o la marca, se geolocaliza en una laptop que nos facilitan y ahí comenzamos a introducir la data del árbol geolocalizado. Se evalúan los árboles que representan un peligro para la ciudadanía y para la propiedad. Si entendemos que sí, estamos recomendando la remoción de ese árbol”, abundó Matta Salgado.
El DRD está obligado a elaborar un inventario de los árboles que serán removidos, en el que debe incluir el nombre común, nombre científico, diámetro a la altura del pecho, altura, condición del árbol y el curso de acción.
Alcalde de Vega Alta sale furioso
El alcalde de Vega Alta, Oscar “Can” Santiago Martínez, y su acompañante a la vista pública, el arborista Alcides Dorado refutaron las declaraciones de Sánchez Parés y llevaron evidencia de troncos de árboles que fueron talados y que no cumplían con los requisitos que justificaban su corte.
Santiago Martínez recalcó que lo escrito en los documentos sobre la tala dista de lo que ha visto en el balneario y se mostró sorprendido cuando la Secretaria del DRD reveló que eran 1,100 árboles y no 566, como él y residentes de la comunidad aledaña habían contado.
El funcionario ha solicitado desde abril de 2019 la titularidad del balneario. Una medida a estos efectos fue aprobada en el Senado, pero la Cámara de Representantes la ignoró.
"Nuestra intención es desarrollar la zona como una empresa municipal, crear empleos y aportar al desarrollo económico, en vista de que el gobierno central no ha podido hacerlo por la realidad fiscal que todos conocemos”, declaró el Alcalde de Vega Alta.
Santiago Martínez salió furioso del salón en que se celebraba la vista pública al escuchar las declaraciones del Secretario del DRNA. Afuera, lo enfrentó cara a cara y le exigió una disculpa por sus expresiones.
Al ser abordado por la prensa, Machargo Maldonado aclaró que sus comentarios no fueron personalistas, pero repitió que la atención al tema se debía a la fecha.
“Yo no estoy diciendo que esa persona particular esté haciendo señalamientos por motivaciones, estoy diciendo lo que pasa en estos días antes de las elecciones que se forman unas situaciones, que hay unos asuntos que cobran mucho interés antes de las elecciones y que después de las elecciones pierden el interés”, expresó Machargo Maldonado.
De acuerdo al alcalde, la situación se pudo haber evitado si Machargo Maldonado hubiese acudido al balneario cuando se lo solicitaron o si el DRD hubiese comunicado sus actos de forma efectiva.
En la vista, la Secretaria del DRD coincidió en que la agencia debió informar mejor al alcalde y la comunidad sobre los procesos.