La Arquidiócesis de San Juan se negó a confirmar si solicitó autorización al Tribunal de Quiebras para vender varias de sus propiedades, según anunciado la semana pasada por el Arzobispo de San Juan, Roberto Octavio González Nieves.

A varias peticiones de información por parte de NotiCel, tampoco confirmó si ya le envió notificación formal a la Junta Directiva del Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe sobre la venta de ese edificio.

El Palacio Arzobispal, el antiguo Seminario Conciliar de San Ildefonso y otras propiedades de la Arquidiócesis, fueron puestas a la venta de manera que puedan generar ingresos con que cumplir con las pensiones de maestros retirados de los colegios católicos.

En la estructura del antiguo Seminario Conciliar se encuentra el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe, en la calle del Cristo en el Viejo San Juan. Fue construido en 1832 y es sede del Centro desde 1986.

El presidente de la Junta de Directores del Centro, el doctor Eduardo Rodríguez Vázquez, afirmó a NotiCel que al no haber recibido noticia alguna sobre la venta del Seminario Conciliar, como se conocía antiguamente al edificio, la administración había planificado incluso una expansión.

'No tenemos ninguna notificación sobre esa supuesta venta. Nosotros tenemos una excelente relación con el Arzobispado. No estamos contemplando ningún cierre, al contrario, tenemos planes de expansión y tenemos intenciones de renovarlo', dijo Rodríguez Vázquez.

Tras otra petición de información el viernes, la licenciada Carmen Conde, abogada de la Arquidiócesis en el caso de quiebra, declaró a traves de una portavoz que 'se va a circunscribir a las expresiones que envió la Arquidiócesis y no va a haber declaraciones adicionales'.

Con el dinero que se genere de la venta de las propiedades, la Arquidiócesis podrá enfrentar el pago de una demanda que presentaron los maestros en 2016 cuando los educadores jubilados dejaron de recibir sus pensiones por parte del Fideicomiso del Plan de Pensiones de Empleados de Escuelas Católicas.

La Iglesia asegura no contar con fondos para pagar las pensiones de quienes fueron sus maestros durante decadas, algunos de edad avanzada, que pueden oscilar entre los 100 y 300 dólares para llegar a fin de mes.

De hecho, el pasado 29 de agosto de 2018, la Arquidiócesis solicitó protección bajo la Ley de Quiebras tras verse contra la espada y la pared ya que el Tribunal Supremo de Puerto Rico declaró que la organización religiosa tenía que responder como una sola entidad, con todos sus bienes, frente a los maestros que buscan cobrar sus pensiones. Antes de radicar la quiebra, la Iglesia intentó que el Tribunal Supremo federal atendiera una solicitud para revocar al Supremo, lo cual no tuvo exito.

Antes de solicitar la protección bajo la Ley de Quiebras, el Tribunal de Primera Instancia emitió una orden de embargo, que tuvo el efecto de sustraer unos $400 mil de las cuentas de la Arquidiócesis.

'Dicho Tribunal (Superior) emitió una orden de embargo de 4.7 millones de dólares aun cuando los demandantes solo habían solicitado $620,000.00. Sobre dicha Sentencia la Arquidiócesis de San Juan fue en alzada al Tribunal de Apelaciones de Puerto Rico que revocó totalmente la Sentencia emitida por el Tribunal Superior. Luego de esto, los demandantes recurrieron al Tribunal Supremo que emitió una Sentencia reorganizando la Iglesia Católica y desconociendo la capacidad legal de las Diócesis, Parroquias, escuelas parroquiales y obviando por completo el Fideicomiso Plan de Pensión', dice el comunicado de la Arquidiócesis.

'Ante esto, la Iglesia está defendiendo ante los foros pertinentes su organización, no obstante, al momento tenemos que cumplir con una opinión, que aunque no es correcta, hay que cumplir. A tales efectos, dado el hecho que la Arquidiócesis de San Juan no tiene el dinero para satisfacer una obligación que no le corresponde, aun así, en atención a la ley y más que a la ley a las personas que reclaman, estamos desprendiendonos de un activo material importante, como es el edificio que ubica en el Viejo San Juan, conocido como el 'Palacio Arzobispal', de forma tal de levantar los dineros necesarios para crear un fondo para ayudar a los pensionados', agrega.

'Entre mantener un edificio y crear un fondo para los pensionados, la decisión es sumamente fácil. La Arquidiócesis de San Juan no es rica monetariamente, es una Iglesia particularmente rica en bendiciones, en fe, esperanza y ayuda al necesitado, no en dinero. Es por eso que el Consejo de Asuntos Económicos de la Arquidiócesis y el Colegio de Consultores de la Arquidiócesis autorizaron la venta de dicha propiedad para crear el fondo para los pensionados. Dicha venta se hará conforme a la normativa de derecho canónico. Una vez se culmine y realice la compraventa de dichas facilidades, los nuevos titulares harán uso del mismo de conformidad con la normativa que nos permite vender propiedades y de acuerdo al Derecho Canónico', se agrega en las declaraciones de la Arquidiócesis.