El inicio de la violencia armada que pudiera cobrar auge en la Isla ante la falta de alimento y provisiones en los establecimientos es una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos que ya hacen largas filas para abastecerse de lo que quede en los estantes de colmados y supermercados.

De igual forma opinó el alcalde de Dorado, Carlos López Rivera, quien urgió al gobierno implementar ya una logística de movilidad, no solo de gasolina y diesel, sino de alimento.

'No vemos los movimientos de camiones, no vemos movimiento de la guardia nacional, como veías en otras ocasiones… Aquí va a haber una situación en la que la gente va a empezar a desesperarse y me preocupa el orden civil. Con esto llevas a que la gente vea que no hay ayudas y ellos van a tomar las medidas que ellos entiendan que van a tener que tomar para salvar a su entorno y su familia', dijo el alcalde. '¿Donde están los portaaviones que estaban fuera de Puerto Rico esperando y llenos de provisiones? ¿Se les perdió el radar? ¿Dónde están los telefonos satelitales que dijo que nos daría a los alcaldes? A mí me preocupa que se pueda tornar una situación en la que las personas pueden tomar las armas y, a nivel de guerrilla, entrar a buscar lo que necesitan'.

Esa misma preocupación llevó a Iris Mercado, residente de Maguayo, en Dorado, a hacer una larga fila a las afueras del supermercado Amigo de Higuillar. Ya se está quedando sin alimentos para sus niños de cuatro, cinco, siete y 10 años.

'Vine a buscar cosas para el desayuno de los nenes. Ya me quede sin nada. Y algo de baterías. No hemos tenido que esperar tanto, pero esto me preocupa', expresó.

Su preocupación, es la de muchos otros que esperaban en una extensa fila de autos afuera del establecimiento. Esto provocó el enojo de una joven madre, quien solo quiso identificarse como Ivelisse, y que intentó entrar a pie al supermercado.

'Esto es absurdo. Vengo a pie porque nos dicen que tenemos que ahorrar gasolina y aquí nos hacen hacer la fila en el auto, gastando la poca gasolina que nos queda. No me dejaron pasar a pie, o sea, tengo que gastar mi gasolina', dijo la mujer, quien reside en la urbanización al lado del supermercado.

'Yo hice una compra grande porque sabía lo que venía, quería rellenar lo que me quedaba. Pero la logística es ilógica. Y esto va a ser peor', acentuó.

Edgardo Báez, empleado del supermercado Amigo de Higuillar, dijo que la fila suele comenzar a eso de las 7:00 de la mañana y dejan pasar los autos en grupos de 10. La fila en el exterior, dijo, se debe a un plan para garantizar la seguridad.

El local cuenta con suministros ya que antes de la llegada del huracán recibieron dos vagones llenos de mercancía por lo que por el momento hay 'suficiente para todo el mundo'.

Brenda Vázquez y Jesús Martínez hicieron la fila de la farmacia Walgreens del mismo sector para comprar alimento de pájaros y, de paso, ver si dan con un paquete de arroz.

'Nosotros estamos bien en casa. Pero me preocupa esta situación. Si veo un saquito de arroz, me lo llevo. Ya me estoy preocupando. Vi la fila del Amigo y están restringiendo la entrada tambien', expresó Brenda.

La pareja, sin embargo, acentuó que al mal tiempo hay que darle 'buena cara'.