La senadora electa con más votos no forma parte de las conversaciones por la presidencia del Senado
María de Lourdes Santiago celebra la posición privilegiada que obtuvo en la elección general.
La ex senadora del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago, no ha sido parte de conversación alguna para elegir el nuevo liderato del Senado de Puerto Rico a pesar de haber sido, por mucho, quien más votos obtuvo en la elección general.
“No se han acercado y no creo que lo harán. Si logran conseguir el voto penepé que les hace falta, no se van a acercar a nadie más”, dijo Santiago en entrevista con NotiCel.
Hasta ayer, la licenciada Santiago había alcanzado 132,208 votos, asegurando el primer lugar en la contienda senatorial, considerablemente alejada de Joanne Rodríguez Veve, del Proyecto Dignidad, y de Thomas Rivera Schatz, del Partido Nuevo Progresista.
En la Cámara de Representantes se libra una batalla campal de dos bandos del Partido Popular Democrático (PPD), una en el que el representante Rafael “Tatito” Hernández se autoproclamó ‘speaker', y otro en la trastienda en la que el representante Jesús Manuel Ortiz batalla por sus votos con el apoyo de legisladores, alcaldes y del ex gobernador Alejandro García Padilla. En el Senado, José Luis Dalmau y Juan Zaragoza, hacen lo propio con menos ruido, mirándose en el espejo de mal sabor que ha dejado la prisa en la Cámara.
“Fíjate que no habían pasado 48 horas y esa ya era la noticia, quién sería el presidente, nada de medidas de transparencia e inclusión”, expresó.
Aunque Santiago es consciente de las pugnas por la presidencia, no le sorprende y analiza la posición privilegiada que alcanzó.
“Yo sabía que tanto Denis (Márquez) como yo éramos una alternativa. Lo que no imaginé era la cantidad que íbamos a obtener. Fue como wow. Nunca pensé que sería por esos números”, dijo la licenciada.
En la Cámara, Márquez obtuvo un segundo lugar por acumulación, superado solo por Héctor Enrique Ferrer, del PPD.
Santiago, por su parte, venía de una campaña previa, en el 2016, en la que aspiró a la Gobernación, y en la que el PIP quedó mal parado, con solo 2.11% de los votos. “No quedamos inscritos, pero la gente sabe que tengo una hoja de vida impecable. La gente sabe que estoy ahí no importa qué. A las dos semanas de haber perdido, estaba frente a los camiones de cenizas en Peñuelas. El país necesita esa certeza de sus líderes”, dijo.