Albert Torres: “Cuando hay agendas escondidas Dios no deja a sus hijos en vergüenza”
El senador reaccionó a la desestimación de un referido al Departamento de Justicia por un supuesto maltrato de menores.
El senador popular Albert Torres tomó con beneplácito la decisión de la División de Integridad Pública y Asuntos del Contralor (DIPAC) del Departamento de Justicia, quien reveló que luego de concluir la investigación preliminar de un referido en su contra por alegaciones de maltrato de menores, se determinó que la evidencia recopilada no establece los elementos de los delitos de maltrato por lo que se desestimó el referido.
El legislador quien estuvo fuera del ojo público por casi un año, luego de también haber sido señalado por alegado maltrato a empleados de su oficina, insistió en que el tiempo le ha dado la razón, atribuyéndole los señalamientos se se han hecho en su contra a una alegada componenda de sectores opuestos a sus posturas conservadoras . “Había una agenda de algunos sectores para callarme , pero el tiempo me ha dado la razón. Cuando hay agendas escondidas Dios no deja a sus hijos en vergüenza” , dijo el legislador popular en entrevista radial (Red Informativa).
Torres se mostró confiado en que el Presidente del Senado José Luis Dalmau eventualmente le devuelva la presidencia de las Comisiones de Recursos Naturales y Agricultura, de las cuales fue removido mientras se daban los procesos investigativos. “Espero que Dalmau cumpla su compromiso de devolverme las Comisiones que se me quitaron cuando comenzaron los procesos en mi contra”, dijo el legislador.
Hace un año, Dalmau Santiago negaba que se le hubiera tirado un “toallazo” al senador Albert Torres, luego de que en votación mayoritaria se rechazara un informe de la Comisión de Ética del cuerpo que recomendaba un voto de censura y una reprimenda pública al senador por el Distrito de Guayama. Al legislador, varios empleados le imputan maltrato verbal y solicitudes de dinero. El informe de la Comisión de Ética concluyó que no hubo un patrón constitutivo de acoso laboral y que tampoco se pudo probar que el senador solicitara dinero a sus empleados de manera directa o indirecta, por entender los que votaron que las sanciones no eran suficientes.