Comisión Multisectorial afirma que la UPR necesita autonomía
El profesor del RUM Juan Carlos Martínez Cruzado señaló que en la UPR hay un problema de micromanejo de parte de la Junta de Gobierno que es “realmente grave”.
La Comisión Multisectorial para la Reforma Universitaria (CMRU) afirmó, en una vista pública en la Cámara de Representantes, que la Universidad de Puerto Rico necesita autonomía ya que es medular para la producción de conocimiento e investigación.
La profesora del Departamento de Ciencias Físicas del Recinto de Río Piedras de la UPR Ethel Ríos Orlandi abundó sobre el significado de la autonomía universitaria ante la Comisión de Educación, Arte y Cultura, presidida por la representante Deborah Soto Arroyo, en la que se discutió el Proyecto de la Cámara 1314 (P. de la C. 1314).
Esta medida propone crear la “Ley de la Universidad de Puerto Rico” para dotar a la UPR de herramientas imprescindibles para garantizar su autonomía, y que le permita contar con los recursos necesarios para garantizar el cumplimiento de su misión.
“No puede haber universidad, ni puede haber academia si no hay libertad de pensamiento, libertad de expresión, y libertad de ejecución. Esto es una cosa (la autonomía) que es extraña al sistema en el que estamos. Tiene que quedar claro que este principio de autonomía en la producción de conocimiento, y en la investigación es medular”, señaló Ríos Orlandi.
El CMRU defendió la medida, y aseguró que la autonomía forma parte del proyecto, ya que la falta de transparencia, la ausencia de participación democrática, la excesiva centralización de poder, el micro-manejo por la alta gerencia universitaria; y la falta de autonomía son problemas que actualmente enfrenta la UPR.
Según la ponencia del Comité, los miembros del CMRU han notado que, el dominio del gobernante del país sobre los nombramientos del máximo cuerpo rector, ha redundado en una falta de rendición de cuentas de parte de la UPR a la Legislatura.
“En ocasiones, los legisladores interpretan el problema como un exceso de autonomía universitaria, cuando en la realidad el problema en la UPR es la ausencia de su autonomía y la presencia en su lugar del poder del primer ejecutivo del país, quien también tradicional e invariablemente ha sido simultáneamente el presidente de un partido político. La autonomía no implica ausencia de la rendición de cuentas. El Artículo 5 del P. de la C.1314, establece claramente que la rendición de cuentas es inherente a la autonomía”, dispuso la ponencia.
Mientras que, Juan Carlos Martínez Cruzado, profesor del Recinto de Mayagüez de la UPR, explicó que la universidad es un centro de pensamiento, en el que tiene que haber un libre flujo de ideas para generar un pensamiento crítico.
“Tiene que haber una libertad de pensamiento, una libertad de expresión, y no puede haber miedo. Ese ambiente de libertad en el que no hay tabú es lo que se conoce como la libertad académica. La autonomía es el escudo que protege la libertad académica de la universidad. La libertad académica es el alma de la universidad; si no hay libertad académica no hay universidad, ya que es la protección contra influencias externas”, explicó Martínez Cruzado.
De igual manera, Martínez Cruzado señaló que en la UPR hay un problema de micromanejo de parte de la Junta de Gobierno que es “realmente grave”.
Respecto a una estructura de gobernanza, el profesor indicó que constituirá en las siguientes: un Consejo Universitario como el cuerpo más alto de gobernanza; una Junta Universitaria; una Presidencia; y en las unidades, Rectorías, Senados Académicos, Juntas Administrativas, Decanatos y direcciones de Departamentos o Programas.
Pese a los planteamientos de los educadores, el presidente de la UPR, el doctor Luis A. Ferrao, se opuso a la medida, ya que pondría en riesgo la acreditación de la Middle States Commission on Higher Education (MSCHE), y de los tres recintos de la UPR y las ocho unidades institucionales que componen la universidad. Además, señaló que la medida “no provee los recursos económicos necesarios para su ejecución”.
“Este proyecto no limita los fondos con los que va a operar la universidad ni fondos públicos. Explícitamente menciona que entre las funciones del presidente, justamente, está hacer acopio de fondos externos, pero también dice que esa búsqueda de fondos externos no puede comprometer la visión de la universidad. O sea, nosotros no andamos vendiendo a pedazos la universidad para conseguir cuatro pesetas, y mejorar el presupuesto”, aseguró Ríos Orlandi.
Según la profesora, este proyecto busca servirle al país a corto y a largo plazo.
Relacionado a la Middle States, los educadores indicaron que la CMRU realizó un estudio detallado de los distintos requerimientos de esta agencia y encontró que, lejos de poner en peligro las acreditaciones por la MSCHE, “la medida legislativa en discusión fortalece sustancialmente la capacidad de la UPR para cumplir con las expectativas y requerimientos de dicha agencia”.
El profesor Martínez Cruzado indicó que utilizan a la Middle States como “el cuco” para meter miedo.
Por otro lado, la presidenta de la Comisión, Soto Arroyo, afirmó que se escucharán todas las partes durante las vistas públicas para alcanzar la mejor conclusión.
“Sabemos que el presidente Ferrao se opone, y no está de acuerdo, pero aún así creo que conversando y escuchando puede que tenga sus enmiendas y queremos trabajarlas con mucho detenimiento. Yo creo que la medida tiene buenas posibilidades, aunque quizás no se le puedan hacer todos los cambios que la CMRU quiere, pero estamos recogiendo todas las opiniones”, compartió a la prensa Soto Arroyo.