Avalan medida para añadir residuos vegetativos y putrescibles como material a ser separado y clasificado
Según el proyecto de ley, el actual manejo de los residuos sólidos en Puerto Rico, que incluye su acumulación sin las debidas protecciones, amenaza la salud pública, el ambiente y la sociedad.
El Senado de Puerto Rico aprobó, en sesión ordinaria, una medida para añadir los residuos vegetativos y residuos putrescibles como material a ser separado y clasificado en el lugar de origen.
El Proyecto del Senado 911 (P. del S. 911), de la autoría de la senadora Elizabeth Rosa Vélez, se aprobó de manera unánime con 23 votos a favor.
La medida busca enmendar la Ley 70-1992, conocida como “Ley para la Reducción y el Reciclaje de Desperdicios Sólidos en Puerto Rico” para añadir nuevas definiciones e incluir residuos orgánicos Tipo 1, que son residuos vegetativos, y Tipo 2, que son residuos putrescibles, como material reciclable.
El Tipo 1 consiste en materiales vegetativos y residuos de cultivo. Mientras que, el Tipo 2 consiste en residuos de comida, agrícolas y estiércoles.
El P. del S. 911 indicó que el actual manejo de los residuos sólidos en Puerto Rico, que incluye su acumulación sin las debidas protecciones, amenaza la salud pública, el ambiente y la sociedad.
“En primer lugar, promueve la proliferación de focos de vectores que pueden causar enfermedades. A la vez impacta los suelos, los cuerpos de agua y la calidad del aire. Por otro lado, el depender casi enteramente de desechar los residuos en vertederos o SRS provoca la expansión de estos, lo cual desafía la justicia social, al afectar desproporcionadamente a comunidades aledañas”, dispuso el proyecto senatorial.
Mientras que, desde una perspectiva fiscal, la medida señaló que el sistema de manejo actual es oneroso para los municipios, ya que tienen la responsabilidad del recogido y disposición. Esta responsabilidad conlleva costos de transporte y el pago de tarifas al momento de depositar residuos en las plantas de separación y procesamiento o en alguna instalación de disposición final (“tipping fee”).
La medida recibió un informe positivo por parte del Departamento de Salud, ya que el secretario de la agencia, el doctor Carlos Mellado López, indicó que el manejo actual de los residuos sólidos en Puerto Rico, incluyendo su acumulación sin las debidas protecciones, amenaza la salud pública, el ambiente y la sociedad.
Según el informe, el secretario aseguró que la aprobación de la medida es meritoria para minimizar el surgimiento de nuevas situaciones de salud pública como resultado de un manejo adecuado de los desperdicios Tipo 1 y Tipo 2 en los vertederos que quedan en la isla.
Pese a que el doctor avaló la medida, Mellado López aclaró que la agencia salubrista no tiene jurisdicción directa sobre los desperdicios sólidos, ya que ese tema le compete al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA).
La secretaria del DRNA, Anaís Rodríguez Vega, señaló que cuenta con el reglamento para la Reducción, Reutilización y el Reciclaje de los Desperdicios Sólidos en Puerto Rico, en el que se incluyen las definiciones de composta, material vegetal y residuos orgánicos. Por esta razón, Rodríguez Vega señaló que “ya se entienden que las definiciones están propuestas y se encuentran en el reglamento”.
Mientras que, el secretario del Departamento de Agricultura, Ramón González Beiro, reconoció en el informe la importancia de la iniciativa, sin embargo, resaltó que el Departamento no cuenta con la pericia necesaria para emitir comentarios sobre el proceso de reducción y reciclaje en los vertederos de Puerto Rico.
La exposición de motivos de la medida indicó que, para reducir la cantidad de residuos orgánicos que se acumulan en vertederos y sistemas de relleno sanitario, se pueden establecer múltiples medidas que requieren la participación de diversos sectores sociales. Asimismo, aseguró que la educación ciudadana es clave para “maximizar la participación y el compromiso de la población en minimizar la generación y manejar adecuadamente los residuos”.