No se ejecutó compra de $13 millones, sino otra.

En lugar de 713 ventiladores, el Departamento de Salud ha realizado órdenes de compra para 280 ventiladores a modo de añadir al inventario para atender la incidencia de casos del coronavirus, o COVID-19, que así lo requirieran.

Sin embargo, ninguno de esos productos ha llegado a la Isla, indicó el secretario de la agencia Lorenzo González Feliciano en conferencia de prensa en a sede de la agencia en San Juan.

“Se han hecho varios pedidos que tienen costos de $30,000 por ventilador o, en lo más bajo, a $18,000 por ventilador. Todo depende de cuándo se genera la compra y la demanda. Independientemente de lo que se haya pedido, muy poco ha llegado a Puerto Rico”, declaró el Secretario, quien lleva dos días en el cargo.

Uno de los efectos del COVID-19 es la dificultad respiratoria entre los contagiados, por lo que a nivel mundial se ha insistido sobre la disponibilidad de ventiladores en los hospitales. En Nueva York, por ejemplo, el gobernador Andrew Cuomo alertó que el estado necesitaba 30,000 ventiladores, por lo que pidió que se permitiera la manufactura de más de estos productos mediante el Defense Production Act.

Lea también: Incierta la compra de ventiladores en Salud

Según el desglose de compras, suministrado por Salud, se trata de un total de 380 unidades, pero la orden de 100 de ellas no había sido completada hasta ayer, miércoles, en la tarde.

Con todas las unidades, supone ser una compra de casi $8 millones y, basado en las fechas, gran parte del cargamento estaría en la Isla para fin de mes.

Órdenes:

Esos 380 ventiladores se sumarían a los 500 disponibles que hay en Puerto Rico, según González Feliciano.

Previo a su renuncia, la exsecretaria de Salud, Concepción Quiñones de Longo, así como la directora de la Oficina de Bioseguridad de Salud, Jessica Cabrera, indicaron que habían 880 ventiladores, de los cuales 345 estaban en uso. O sea, habían 535 ventiladores disponibles.

Luego de su renuncia, en cambio, Quiñones de Longo denunció que Marisol Blasco, quien es ayudante de la gobernadora Wanda Vázquez Garced, intentó obligarla a firmar en 20 minutos un contrato para adquirir 713 ventiladores a un costo de $13,297,450, más el Impuesto por Ventas y Uso (IVU) pertinente.

La compra hubiera sido con Puerto Rico Sales & Medical Services, empresa a la que se le encargó la mayor cantidad de ventiladores en las órdenes nuevas.

En la mañana del miércoles, el secretario de Asuntos Públicos de La Fortaleza, Osvaldo Soto García, señaló que las declaraciones de la exsecretaria estaban erradas. De acuerdo a su recuento de los hechos, a Quiñones de Longo le pidieron que acudiera a una reunión dentro de 20 minutos, no tanto así que firmara el contrato millonario en ese corto plazo.

La exfuncionaria, por su parte, optó por no firmar el documento porque los productos llegarían a Puerto Rico en 14 meses. NotiCel supo, mediante una fuente interna de Salud, que ante la renuencia de Quiñones de Longo a firmar la orden de compra, la misma fue enmendada para recibirlos entre cuatro a cinco meses.

El cambio consta en un correo electrónico enviado por el presidente de esa empresa, Manolo Matienzo, quien aseguró que se equivocó en la propuesta de venta, pues la entrega se realizaría en 16 semanas y no en 14 meses.

“Aparte, le estoy avisando que estaré entregando al Departamento de Salud un total de 25 ventiladores la semana que viene y seis ventiladores al Hospital Pediátrico Universitario”, esbozó Matienzo, mensaje que dirigió a la secretaria auxiliar de administración de Salud, Adil Rosa Rivera.

Por falta de datos y proyecciones, desde un inicio el Gobierno de Puerto Rico ha afirmado que desconoce la cantidad real de equipo médico que necesitaría para atender esta emergencia. No obstante, en su momento se llegó a reconocer la necesidad de adquirir más ventiladores porque los disponibles no eran suficientes para subsanar una emergencia mayor.

González Feliciano, por su parte, indicó que hasta la fecha los hospitales se encontraban en un 38% de ocupación, un incremento de 2% desde el martes. La esperanza del Secretario de Salud es que la ocupación se mantenga en menos de un 50%.

Hasta ayer, Salud había elevado el número de víctimas fatales a 11 por el COVID-19, mientras que el número de casos positivos se fijó en 286.