El juez superior de Bayamón, Jose Ramírez Lluch, declaró no ha lugar una petición de la defensa de Pablo Casellas Toro para que se ampliara la orden protectora que prohíbe a las partes, al Departamento de Justicia, la Policía y al Instituto de Ciencias Forenses divulgar la prueba del caso por el asesinato de Carmen Paredes.

'El tribunal se reafirma en la orden protectora… En este momento no la va a ampliar porque no lo entiende necesario', declaró Ramírez Lluch.

No obstante, el juez sí concedió a la defensa, con el consentimiento de la fiscalía, que los documentos relacionados a la salud y tratamientos médicos del acusado sean sellados por lo que no estarían disponibles para la prensa ni para terceros.

Al solicitar la reconsideración, el abogado defensor Harry Padilla reconoció que las medidas que pidieron se aplican en momentos en que se está seleccionando al jurado, pero argumentó sin éxito que lo que solicitó son 'medidas profilácticas' para evitar que sigan saliendo detalles del caso en la prensa, la que dijo se debe limitar a reportar lo que sucede en el foro judicial.

El otro abogado defensor, Arturo Negrón García, planteó que _a la luz de la publicidad que ha recibido el caso_ 'ya el país condenó' a su cliente sin que haya desfilado la evidencia en su contra en un juicio.

'En este país se ha formando una opinión pública ya en este caso', destacó el licenciado, quien señaló al juez por supuestamente estar mostrándose 'inflexible' en cuanto a las fechas que dispuso para que el caso se mueva.

La fiscal de Distrito de Bayamón, Phoebe Isales, destacó por su parte que ampliar la orden protectora como solicitó la defensa no es necesario en esta etapa de los procedimientos judiciales, con lo que coincidió el magistrado.

'La vacuna hay que ponerla en el momento en que se está escogiendo un jurado. No se pone antes. La jurisprudencia nos dice que en ese momento (de selección de jurado) es suficiente… lo otro sería meter a una persona presa antes de que cometa delito, por si acaso', sostuvo Isales.

El juez Ramírez Lluch fue enfático en que quiere garantizar que el acusado tenga un juicio justo e imparcial, pero además que sea un juicio rápido.

Por ello, ordenó a las partes 'a moverse' en el proceso de descubrimiento de prueba que no se ha iniciado aún y señaló varias fechas para que eso suceda y se informe debidamente al tribunal.

Las partes deberán reunirse el 13 de noviembre, fecha en que se iniciaría el juicio, para compartir documentos relacionados al descubrimiento de prueba, según ordenó el juez.

El 6 de diciembre las partes deberán comparecer al tribunal a una vista de estatus y presentar una moción conjunta sobre el avance del descubrimiento de prueba.

Tentativamente el juez pautó el inicio del juicio para el 15 de enero.

NotiCel había adelantado que con toda probabilidad, el caso contra Casellas Toro no se vería en lo que queda del 2012.