Ante una comisión senatorial, expresaron que falta personal y equipos para realizar las tareas diarias que se supone ejecuten, a la vez que reclamaron que no han recibido aumentos salariales por más de 10 años.

Empleados del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), denunciaron la falta de personal y de equipos para realizar las tareas diarias que se supone ejecuten, a la vez que reclamaron que no han recibido aumentos salariales por más de 10 años.

La denuncia la formuló Iram Ramírez Linares, director ejecutivo de la unión que agrupa a estos empleados, Servidores Públicos Unidos (SPU), durante una audiencia pública de la Comisión de Cumplimiento y Reestructuración del Senado.

Afirmó este que pese a la reclasificación a través del Plan de Clasificación y Retribución Gubernamental Interagencial, la mayoría de estos trabajadores no recibió ninguna remuneración, y otros recibieron una partida que describió como “injusta”.

Entre los reclamos que presentó en su ponencia Ramírez Linares este destacó la falta de personal en todas las áreas del DRNA, así como la necesidad de flota vehicular y equipo de seguridad para poder ejecutar las tareas diarias.

“Actualmente, el Cuerpo de Vigilantes se compone de aproximadamente de 300 oficiales, y cada uno realiza el trabajo de tres a cuatro vigilantes. Mínimamente, se requieren unos 900 vigilantes. Es necesario que recluten y entreguen el equipo y herramientas necesarias para trabajar en un lugar que cumpla con la salud y seguridad que necesitan”, señaló.

Agregó que pese a que la agencia adquirió nueva flota de vehículos y embarcaciones de impacto con motores de alto caballaje, son muy pocas unidades. Tampoco el DRNA cuenta con el presupuesto para las reparaciones y el mantenimiento que se requiere para que estén en buenas condiciones.

A preguntas de la presidenta de la Comisión, Marially González Huertas, sobre el pago de horas extra a los vigilantes, comentó que las horas extras federales se pagan cuando consiguen el presupuesto, y presentó como ejemplo las horas del huracán María, que tardaron años en pagarlas. Por otro lado, las horas extras estatales no las están pagando porque la Ley 26 eliminó el pago de estas, dijo.

“Lo que usted acaba de relatar es una historia de horror, y me apena porque trabajar en el Departamento de Recursos Naturales era un prestigio en el país. Todo es parte de una receta para acabar con la operación de un espacio fundamental para los puertorriqueños y puertorriqueñas, y cuyo abandono le conviene para ciertos intereses en el país”, comentó la senadora del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago Negrón.

En respuesta a las denuncias del líder sindical, la Secretaria del DRNA Anaís Rodríguez Vega, sostuvo que en torno al aumento salarial, al cuerpo de vigilantes, de $1,341 se les aumentó a $2,317. Indicó además que están en proceso de reclutar nuevos trabajadores para esta área, así como personal técnico.

Sobre las facilidades clausuradas en Ponce, el DRNA dijo que cerró ante los daños del huracán María, por lo que trasladaron a los empleados a la unidad marítima, pero que en los últimos meses han estado en proceso de reconstrucción, y recalcó que no tienen plan de cierre, solo reparaciones.

Según personal del DRNA, la unidad marítima en Ponce, donde ejercen 16 empleados de la Unidad Terrestre, tiene problemas desde el huracán María con el tipo de alambrado, por lo que tienen problemas con los teléfonos e internet. Debido a esta situación, su método de comunicación es a través de radios, señalaron.

“Tenemos como propósito conocer las condiciones de empleos en el Departamento de Recursos Naturales y el cuerpo de vigilancia bajo la Resolución del Senado 596. El 10 de abril constatamos el abandono y deterioro de las oficinas que albergaban la Unidad Terrestre en Ponce. Los empleados fueron trasladados a la Unidad Marítima, lugar que no cuenta con espacio para áreas de trabajo razonables. Por esto, queremos conocer la realidad que enfrentan los empleados de la agencia”, expresó la presidenta de la comisión, González Huertas.