Quieren regalarle un barco a un náufrago que sobrevivió con kétchup
Empresa Heinz busca a un hombre de la isla caribeña de Dominica, quien estuvo a la deriva en un velero 24 días y se mantuvo con vida gracias a la famosa salsa, ajo en polvo y cubitos de caldo.
MIAMI - La empresa fabricante del popular kétchup Heinz ha pedido ayuda a la gente para dar con un hombre originario de la isla caribeña de Dominica que afirma haber estado a la deriva en un velero 24 días y haberse mantenido con vida gracias a un bote de esa salsa, ajo en polvo y cubitos de caldo.
El objetivo de esta operación de búsqueda iniciada el 14 de febrero es regalarle a Elvis Francois, de 47 años, una embarcación, a pesar de que cuando fue rescatado por la Armada colombiana en enero pasado dijo no tener conocimiento alguno de navegación.
Quizás por eso y el mal recuerdo de su involuntaria aventura no aparece por ningún lado, a pesar de que la empresa se ha puesto en contacto con las autoridades de Dominica y de Colombia.
"Estamos buscando pistas creíbles para contactar a Elvis para ofrecerle un nuevo barco equipado con tecnología de navegación y así evitar otro desastre en el futuro", escribió la compañía en su mensaje a la ciudadanía en Instagram.
A fines de enero la Armada colombiana informó de que había hallado a Francois a bordo de un pequeño velero a 120 millas náuticas (unos 222 kilómetros) al noroeste de Puerto Bolívar, en el departamento de La Guajira (noreste), gracias a que había escrito en el casco la palabra "Help", ayuda en inglés.
Según les contó Francois a los marinos colombianos, el 25 de diciembre se encontraba en la isla Saint Maarten en las Antillas Holandesas a orillas del mar realizando tareas de mantenimiento a un velero cuando el viento lo llevó a mar abierto.
Francois no tenía ninguna experiencia en navegación por lo cual quedó perdido y desorientado en el mar y sus intentos de maniobrar la embarcación y conectarse por radio no dieron resultados.
Cuando fue rescatado dijo que llevaba 24 días a la deriva y que sobrevivió con un bote de kétchup, ajo en polvo y pastillas de caldo.
No tenía agua, así que tuvo que hidratarse con lo poco que pudo recoger de la condensación que se formaba en la vela de barco y en un saco, según narró el comandante Carlos Urbano Montes.
La Armada colombiana le ofreció atención médica y fue enviado a Migración Colombia para el inicio de los procedimientos correspondientes para el retorno a su país de origen.