Emisión es un 'parcho', pero es mejor que nada, según analista financiero
La emisión de $3,500 millones en bonos que aprobó la Legislatura el jueves para pagar alrededor de $2,900l millones en deuda y darle liquidez al Banco Gubernamental de Fomento (BGF) es 'una mala idea' pero es mucho mejor que refinanciar la deuda o no pagarla, opinó un analista financiero.
Robert Donahue, director gerencial para Municipal Market Advisers, opinó que el Estado Libre Asociado ha tomado la mejor opción para lidiar con la crisis fiscal pero catalogó la emisión como una 'curita' o 'parcho' que ayudará a la Isla moverse hacia adelante para resolver sus problemas.
El crédito de Puerto Rico fue degradado recientemente a nivel chatarra lo cual le ha cerrado puertas al Gobierno para conseguir financiamiento a intereses razonables. Debido a las condiciones impuestas por los 'hedge funds' o dueños de fondos de riesgo, el gobierno colocará una emisión de $3,500 millones la cual tendrá un vencimiento que se estima podría ser de 10 años y que devengaría intereses de entre un 10% a 12%.
El senador Ramón Luis Nieves, uno de tres senadores populares que se opuso a la emisión, dijo que la misma podría aumentar el déficit entre $200 o $350 millones debido al pago de intereses casi usureros y retrasar una recuperación económica.
Nieves dijo que la Isla tiene que aceptar que la deuda total de Puerto Rico, que es de unos $70 mil millones 'es impagable' y tratar de refinanciar la misma para dedicar sus esfuerzos a generar actividad económica y empleos.
Donahue se opuso la idea de refinanciar la deuda al destacar que es un proceso sumamente 'complicado' que tiene consecuencias 'sumamente negativas'.
El analista explicó que no solamente los bancos dejarían de prestarle a Puerto Rico sino que perdería una gran cantidad de bonistas porque se enviaría una mala señal al mercado.
'Ya muchos inversionistas han vendido sus bonos por la degradación', destacó.
'Esto abre una Caja de Pandora porque muchos bonistas radicarían demandas por violación de contrato', declaró Donahue.
Al preguntársele sobre la corta fecha de duración de la emisión, la cual se dijo que podría ser de 10 años, Donahue dijo que eso se hace porque es una prestación para poder operar y para impedir que se afecten generaciones futuras. 'Pero se aumenta el pago anual y eso pondrá presiones sobre el presupuesto', declaró Donahue
Acerca de las demandas que han hecho los llamados 'hedge funds' para aceptar comprar bonos chatarra, Donahue dijo que con la excepción del Fondo Monetario Internacional, es inusual que inversionistas dicten pautas a una jurisdicción política y que se espera que las jurisdicciones hagan decisiones correctas para garantizar sus pagos.
'Los bonistas no hacen política', explicó.
La decisión que tomó el Senado de autorizar demandas contra el ELA en tribunales estatales y federales en el distrito de Manhattan en Nueva York para satisfacer a los bonistas podría aumentar el tamaño de la emisión y ayudar a bajar su interés pero cualquier juez, ya sea de Nueva York o de Puerto Rico, tendrá que en su día basar su determinación en lo que diga el contrato de la emisión.
El presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara, Rafael Hernández, dijo que la Cámara concurrirá el lunes con la emisión, de la cual dijo estimó que subiría en unos $14 millones la deuda de obligaciones generales que es de sobre $5 mil millones pero dijo desconocer a cuánto podría ascender el servicio de la deuda.