Alegan que han realizado su trabajo y le recuerdan a la familia de los jóvenes cuál es su función.

El secretario del Departamento de Estado, Omar Marrero Díaz apuntó hoy, martes, a que han atendido con diligencia el caso de los hermanos puertorriqueños detenidos en México desde el verano.

Luis y Erick Zapata están detenidos desde el 28 de junio, cuando, en medio de unas vacaciones familiares, fueron señalados por violación a una menor de 17 años. Inicialmente, la menor dijo que fue violada, pero luego de que unas pruebas médicas no presentaran signos de violación, pretendían enmendar los cargos a agresión sexual.

Los hermanos, en cambio, no han sido acusados nunca formalmente, aunque permanecen detenidos. A inicios de este mes de noviembre se esperaba que ambos fueran liberados gracias a la intervención de la Organización Mundial por la paz. No obstante, la salida de los hermanos no se ha concretado.

En medio de la larga espera y de alegaciones de inocencia, la familia de los hermanos se ha expresado poco complacida con la intervención del Departamento de Estado en la situación.

Marrero Díaz, por su parte, respondió hoy detallando que han realizado su trabajo y recordó que en casos como este, la función del Departamento de Estado de Puerto Rico es fungir como enlace entre los hermanos Zapata Hernández, el Consulado de los Estados Unidos en Playa del Carmen y el Consulado de México en Puerto Rico.

“Esto es un caso que conmueve al pueblo y como padre comprendo la frustración y desesperación de esta familia. Me comprometo a continuar realizando todos los esfuerzos necesarios hasta la terminación de este caso, conforme al estado de derecho aplicable. No bajaremos la guardia y continuaremos actuando con prudencia y discreción para no afectar el proceso judicial. Nuestro norte seguirá siendo velar por la integridad del proceso”, expresó el Secretario de Estado en declaraciones escritas.

Marrero Díaz agregó que desde julio realizan trabajos.

"A principios de julio del 2021, el Departamento de Estado a través del secretario auxiliar de Relaciones Exteriores Félix A. Lizasuaín, orientó a los miembros de la familia y canalizó la comunicación entre ambos sistemas para que recibieran asistencia sobre los procesos de índole criminal en jurisdicción fuera de los Estados Unidos, como en este caso. A su vez, se les proveyó una lista de abogados validados por el Consulado para su evaluación y acción correspondiente", sostuvo.

"Otra de las gestiones inmediatas realizadas por el Departamento de Estado fue coordinar una visita para que el personal del Consulado de los Estados Unidos en Playa del Carmen visitara a los jóvenes en el centro de detención para velar por su integridad física, que gozaran de buena salud, recibieran visitas religiosas, de así requerirlo, y servicio de nutrición especial para uno de los hermanos", mencionó también.

A raíz de unas alegaciones por parte de los familiares de los jóvenes por una supuesta violación a sus derechos, el Departamento de Estado solicitó la intervención de la Jefa de Misión del Consulado de los Estados Unidos en Playa del Carmen, Natalia Rincón, pero esta indicó que los hermanos puertorriqueños declinaron hacer una declaración oficial bajo juramento a través del Consulado para elevar el asunto con las autoridades locales.

"Esto es un requisito necesario, conforme a la reglamentación vigente para dar paso al proceso diplomático correspondiente", dijo Marrero Díaz al respecto.

“De manera reiterada, el secretario auxiliar de Relaciones Exteriores del Departamento de Estado de Puerto Rico sostiene conversaciones directas con el padre de los jóvenes, en las cuales discuten cada etapa procesal del caso, además de orientarles sobre estatus migratorio, ayudas, recomendaciones y asesoramiento sobre el manejo de este asunto”, finalizó diciendo el Secretario de Estado.

Al momento, sigue sin haber una fecha certera para la salida de los hermanos.