El secretario del Departamento de Estado, Omar Marrero Díaz dijo hoy, jueves, que se ha mantenido ayudando a la familia de los hermanos Luis y Erick Zapata, detenidos en México, pero que "hay un problema con la comunicación" entre las autoridades.

El funcionario reaccionó en entrevista radial (Radio Isla 1320) a las alegaciones que apuntaban a que los jóvenes saldrían en libertad hace dos semanas.

Hoy, ninguno ha sido puesto en libertad, sino que siguen en prisión. La alegada absolución de ambos era como parte de la intervención en el caso de la Organización Mundial de la Paz.

Los hermanos Zapata fueron arrestado mientras se encontraban de vacaciones en México. Alegadamente, cuando disfrutaban de la noche en el hotel en el que se hospedaban, una menor de 17 años dijo que ambos habían abusado de ella.

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Tras exámenes médicos, no se pudo probar la violación, por lo que estudiaban modificar los cargos a agresión sexual en lugar de violación. No obstante, ni a Luis ni a Erick los han acusado formalmente y la menor desistió de continuar con el caso.

Pese a que en varias ocasiones la familia de los jóvenes ha aludido a que han sido olvidados por el Gobierno de Puerto Rico, hoy Marrero Díaz aseguró que han estado en comunicación con la familia e incluso, con el Gobierno de México.

Según dijo, cuando se enteró de que saldrían de prisión, se comunicó con las autoridades mexicanas y ahí se percató de que hay un vacío en la información.

"Una tía de los muchachos, de los hermanos Zapata, salió y comunicó que iban a salir prontamente. Esa información inmediatamente salió, porque no era información que me habían provisto las autoridades americanas ni mexicana, y tan pronto me comunique con el cónsul, él no tenía información para confirmarlo y estamos esperando una respuesta oficial por parte del México", dijo al respecto.

"Hay un problema con la comunicación", sentenció también.

Al momento, no hay fecha de salida para los hermanos.