La Comisión Especial para el Estudio de las Normas y Procedimientos Relacionados con la Compra de Combustible, la cual recibió información sobre la compra y manejo del asfalto líquido por parte de suplidores de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), reveló que hubo manipulación y falsificación de análisis de laboratorios en la compra del producto fuera de especificaciones y violaciones a la ley.

Entre los hallazgos de la Comisión, se encontró que la ACT no tuvo ni tiene la capacidad necesaria para analizar el asfalto líquido y determinar si el material cumple o no con las especificaciones requeridas en los contratos de los proyectos adjudicados y pagados por la autoridad.

Según el informe, que presentó el Senado, la Comisión recibió información y documentación a los efectos de que algunos de los importadores de asfalto eran compañías que habían sido convictas, por lo que se suponía no pudieran realizar negocios con el Estado Libre Asociado de Puerto Rico por virtud de la Ley 458-2000. Entre las compañías mencionadas se encuentra VITOL y Trafigura, quienes fueron objeto de investigación.

Sin embargo, no se ha encontrado evidencia que apunte que las mencionadas compañías hayan realizado negocios directamente con el Gobierno de Puerto Rico para el suplido de asfalto.

Asimismo, en el informe final de la Comisión se reveló que en Puerto Rico ni tan siquiera existe un laboratorio privado para que se realicen los análisis pertinentes.Por lo tanto, la ACT depende de las certificaciones de calidad del asfalto líquido que le someten los mismos importadores del material. Los laboratorios que realizan ese tipo de análisis están fuera de Puerto Rico.

De otro lado, aunque laACTle requería a los importadores de asfalto que mensualmente le certificaran el precio en el mercado del asfalto líquido,no se tiene establecido un método con el que se pueda verificarel verdadero precio del mercado. Por lo tanto,asumió el riesgo de que el asfalto que se le estuviera vendiendo fuera más costoso que el precio real del mercado.

Lo que podría resultar en que la ACT posiblemente haya estado pagando en exceso del verdadero valor de sus proyectos. Cantidad que representaría una pérdida cuantiosa al erario.

La mayor parte de los proyectos de la ACT requieren una concentración de asfalto líquido de lo que la industria conoce como 64-22. Y para saber si el asfalto líquido utilizado en la mezcla tiene la concentración pertinente, es necesario realizar un análisis de laboratorio de una muestra tomada una vez culminado el proyecto. Sin embargo, la ACT no requirió dicho análisis a los contratistas. Por lo tanto, la agencia nunca tuvo la certeza de que se le hayan entregado proyectos que cumplieran con las especificaciones del contrato.

Asimismo, se suponía que la ACT certificara que los proyectos que fueron sufragados por las autoridades federales cumplían con las especificaciones que establecen las autoridades. Acción que la agencia realizó, aún sin haber hecho los análisis de las pruebas del proyecto.

Sin embargo, algunas de las alegaciones de la industria es que se adulteró la mezcla, rebajando la concentración de asfalto líquido.

Sobre dicho planteamiento, la Comisión tiene en su poder el resultado de una prueba de un proyecto entregado y aceptado por la ACT, el cual no cumplió con la concentración requerida.

Esta investigación iniciada por Comisión Especial, se dio a conocer en la última sesión extraordinaria del gobierno de Alejandro García Padilla. Sin embargo, la misma no concluyó debido al cambio de gobierno, no obstante la Comisión resaltó la importancia de continuar la misma.