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Posponen vista de la masacre de Guaynabo por 'migraña' de López Mulero

El segundo señalamiento de vista preliminar contra Christopher Sánchez Asencio y Jose Luis Bosch Mulero, acusados por la masacre de Guaynabo, fue suspendido este viernes luego que la abogada de uno de los imputados presentara problemas de salud que le impidieron continuar el proceso en el que se determinaría causa para juicio.

Mayra López Mulero, representante legal de Bosch Mulero, explicó a su salida de sala que un fuerte dolor de cabeza obstaculizaba su participación en el proceso preliminar, por lo que solicitó la posposición de la audiencia.

'Tengo un dolor que me está rompiendo la cabeza y sé que ustedes entienden eso', sostuvo la licenciada a la prensa en el pasillo del cuarto piso del Tribunal de Bayamón.

Así las cosas, y por tercera ocasión, la vista preliminar continuará el próximo lunes, 26 de enero en la sala 404 del Tribunal de Bayamón que preside la jueza Sylvia Díaz Solla.

'Si la defensa se compromete a ese día terminar los contrainterrogatorios de los seis, yo no tengo problema. El lunes escucharé los seis. Yo me envenené anoche, estoy mal y estoy aquí', subrayó Díaz Solla justo antes de suspender los trabajos.

En la sala del centro judicial los colegas de López Mulero, Oscar Martínez Borrás y Orlando Cameron Gordon, peticionaron a la magistrada la nueva fecha y se comprometieron a culminar ese día el señalamiento.

'En todo momento este tribunal ha insistido en continuar los trabajos, pero me veo precisada a dar un nuevo señalamiento. El lunes es para terminar este caso. Si hay seis testigos, pues los seis testificarán. Este caso no aguanta tantas vistas', puntualizó la jueza.

Todos los testigos que sentarán los fiscales Janet Parra Mercado, María del Mar Ortíz Rivera y Miguel Alameda Ramírez son funcionarios, la mayoría, agentes o investigadores de la Uniformada.

'La prueba que tenemos es fuerte, contundente y no se derrota. El Ministerio Público siempre ha estado preparado', indicó Parra Mercado.

Más temprano este miércoles los representantes legales tuvieron un turno cada uno para el contrainterrogatorio al menor de 13 años, único sobreviviente de la matanza.

Tras cinco horas de cuestionamientos, el niño, al que algunos apodan 'Toño', narró lo que percibió durante la noche del 17 y madrugada del 18 de noviembre pasado, día en que se reportaron los sucesos en la urbanización Los Frailes en Guaynabo.

A preguntas de López Mulero, el niño indicó que la relación de su padre con Sánchez Asencio, al que le había alquilado su otra casa, era mala.

'Por qué dices que la relación de tu padre era mala?', preguntó la representante legal de Bosch Mulero.

'Porque a Christopher a veces se le olvidaba pagar la renta y llamaba a mi papá para que limpiara la piscina y le hiciera cosas de la casa. Mi papá le enseñaba cómo hacerlas', contestó el jovencito, quien, en ocasiones, tenía cierta dificultad para organizar sus ideas al español.

El estudiante de octavo grado declaró, además, que aunque no vio cuál de los imputados disparó, sí dijo ver a ambos con un arma en sus manos apuntándole a sus familiares. Una de esas armas, agregó, le fue dada a Sánchez Asencio por Bosch Mulero en el automóvil en donde se llevaron a su hermano mayor y él.

El menor pudo ver a los dos acusados con guantes en sus manos, pero sostuvo no recordar desde qué momento los llevaban. 'Tenían guantes azules, como de doctor', mencionó sobre el particular.

En el contrainterrogatorio de Cameron Gordon, la abogada de Bosch Mulero objetó en más de 10 ocasiones las declaraciones del menor e, incluso, en un momento dado dijo, 'por eso es que este proceso había que separarlo'.

El niño testificó que conocía a Christopher hacía poco tiempo, pero que al otro sujeto (Bosch Mulero) nunca lo había visto. El jovencito se refirió a ese acusado en todo momento como 'el hombre grande' o 'el gordo'.

De igual forma, apuntó que durante esa noche, el cliente de Cameron Gordon mencionó que no quería hacer lo que estaba haciendo, aunque después sostuvo que el que lo había expresado era Bosch Mulero.

Los dos acusados enfrentan sobre 40 cargos por, entre otras cosas, asesinato en primer grado, Ley de Armas, conspiración y secuestro agravado.

Mayra López Mulero (Josian Bruno/Archivo NotiCel)
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