Un grupo de diez quiroprácticos y dueños de clínicas de quiropráctica demandó al Fondo del Seguro del Estado por supuestamente diseñar un esquema discriminatorio para eliminar su práctica de los servicios medicos que se proveen a trabajadores lesionados.

Los demandantes solicitan que se emita un interdicto para que la CFSE deje de discriminar contra los quiroprácticos y que se les otorgue al menos $3 millones por pérdidas económicas.

NotiCel no pudo obtener una reacción inmediata de la CFSE.

Edgardo Sanabria Mariani, oficial de prensa de la CFSE, emitió una reacción a la noticia a media mañana, tras explicar que la directora de la Oficina de Comunicaciones de la entidad estuvo fuera durante la semana.

'Sobre las alegaciones de la demanda, las mismas serán atendidas en el foro judicial correspondiente por nuestros abogados. Aprovechamos para dejar claro que nuestra política es asegurar el mejor tratamiento médico conforme a la Ley Número 45-1935 a los trabajadores lesionados. Ellos son nuestra prioridad', expresó Liza M. Estrada Figueroa, administradora de la CFSE, según las declaraciones escritas enviadas por Sanabria Mariani a NotiCel el sábado.

La demanda acusa a la CFSE de establecer condiciones discriminatorias para restringir los servicios ofrecidos por los quiroprácticos y de distribuir comunicaciones injuriosas contra los quiroprácticos.

'Los demandados, actuando individualmente y en común acuerdo, crearon un esquema para reducir servicios quiroprácticos a un nivel secundario y marginal de tratamiento y/o para eliminarlo como tratamiento para personas cubiertas por el FSE', dice la demanda.

Los demandantes son los doctores Luis B. Rivera Nazario, Juan M. López, Elvin Siverio Casanova; . Leslie Hernández Quiñones; Marcos J. Arraiza Cabán; Víctor Domínguez; Miguel Serrano; Mariano Román; Dr. Nelson Vélez; and Dr. Siro Gutiérrez Jovet. El Centro Quiropráctico Dr. Juan M. López and Grupo Quiropráctico del Norte C.S.P. también figuran como demandantes.

La demanda sostiene que con sus acciones la CFSE ha afectado el comercio interestatal. El mercado afectado por la actuación del CFSE, según la demanda, es aquel que trata los desórdenes neuromusculoesqueletales y condiciones similares que vienen como consecuencia de accidentes en el trabajo.

Los demandantes también acusan a la CFSE de haber violentado su debido proceso y de negligencia.

La demanda cita numerosos estudios que demuestran la efectividad de la quiropráctica en el tratamiento de pacientes. No obstante, los quiroprácticos a través de los años han sufrido discriminación por parte de la profesión médica. En el 1990 la CFSE decidió incluir a los quiroprácticos en su plan de tratamiento a pacientes y en el 2009, la entidad abogó por los servicios en una vista en la Legislatura.

No obstante, la CFSE ya años antes estaba discriminando contra los quiroprácticos a la hora de darle tratamiento a trabajadores lesionados, a pesar de que una visita a un quiropráctico es 40 por ciento menos costosa que visitar un médico.

En el 2003 una de las demandadas, Isabel Lastra, directora médica del CFSE en Bayamón, comenzó a denegar contratos a quiroprácticos, incluyendo a los demandantes, quienes tuvieron que pelear por los mismos.

En el 2004 se alega que Lastra detuvo los referidos a quiroprácticos luego de alegar en un memo que la quiropráctica hacía daño a pacientes y era inefectiva.

En el 2004, Lastra le envió una carta a Gutiérrez Jovet negándole un contrato porque la quiropráctica era dañina.

Los demandantes advinieron en conocimiento de las prácticas anti discriminatorias de la CFSE cuando llegó a sus manos en el 2013 una carta firmada por la doctora Sheila Rivera la cual contenía información falsa sobre la quiropráctica.

La carta, la cual otra demandada, la doctora Lorena Díaz ayudo a redactar, decía que el cuidado quiropráctico podía ocasionar daños a la vértebra, derrames y lesiones a la columna espinal que podían llevar a una parálisis, ocasionar sangrado en el cráneo y llevar a la muerte. La carta fue enviada a nueve directores regionales y unos 100 doctores primarios y pacientes

'Los demandados han promulgado y diseminado nuevas guías para servicios quiroprácticos con el fin de boicotear quiroprácticos y catalogarlos como peligrosos', dice la demanda. También acusan la CFSE de impedir que pacientes vean quiroprácticos y de prevenir que médicos primarios refieran pacientes a quiroprácticos.

La CFSE tiene actualmente oncequiroprácticos y 100 fisiatras.

La demanda alega que en octubre del 2013, el doctor Miguel Serrano se reunió con Sheila Rivera para discutir la carta cuya existencia ella negó. No obstante, Rivera describió la quiropráctica como medicina alterna y alegó que los quiroprácticos no son doctores.

Aunque ella admitió que se trató un dolor de espalda con un quiropráctico y que fue efectivo, le aseguro a Serrano que hay mejores alternativas, como la cirugía de espalda,

La demanda alega que la CFSE contrató a Yamil Rivera, un cirujano ortopédico que es sobrino de Rivera para tratar pacientes que antes eran referidos a quiroprácticos.

Durante una reunión en noviembre del 2013 entre Siverio y los demandados doctores José Colón Grau y Rivera Serrano, se le aseguró a éste que la política en torno a los quiroprácticos no había cambiado.

No obstante, para referir a un paciente a un quiropráctico, la CFSE requiere autorización del director regional y de un médico primario, cuando antes sólo se requería el medico primario.

Los tratamientos ofrecidos por los quiroprácticos se limitaron a dos semanas y se requiere autorización del director regional para extenderlos.

En el pasado, un paciente tenía derecho a 18 visitas y a un tratamiento de seis semanas con un quiropráctico.

Los doctores Colón Grau y Rivera Serrano le expresaron a Siverio que los pacientes del CFSE no toman decisiones sobre sus tratamientos porque la corporación no se rige por la Carta de Derechos del Paciente.

López, Román y Siverio alegan que cuando fueron a renovar sus contratos el mes pasado con la CFSE, se incluyó en el contrato un documento que resultó ser la carta de Rivera catalogando la profesión quiropráctica como peligrosa.

López se negó a firmar el contrato al declarar que no firmaría nada que dijera que su práctica es peligrosa cuando no lo es. De igual forma actuaron Román y Siverio.

Al unir la carta con los contratos, la demanda alega que la CFSE estaba tratando de restringir el acceso de pacientes a quiroprácticos. De hecho, los demandantes alegan que tienen sobre 70 cartas de pacientes que alegan que la CFSE les negó tratamiento con quiroprácticos para sus lesiones.

*Esta noticia fue actualizada a las 11:20 a.m. para incluírla reacción de la CFSE

Demanda de quiroprácticos contra el Fondo - NotiCel_7795