Exalcalde de Washington D.C. ofrece su receta para balancear el presupuesto
El exalcalde de Washington D.C., Anthony Williams, compartió el miercoles su receta que llevó a la ciudad de un deficit de $518 millones a un superávit de $1,600 millones.
Williams, quien fue alcalde de 1996 al 2005, aclaró que no venía a dictar instrucciones a los políticos del patio sino más bien a ofrecer una serie de principios que lo ayudaron a enderezar las finanzas de Washington D.C.
Antes de llegar a la alcaldía, Williams laboró como CFO, oficial ejecutivo financiero, para varias ciudades. No obstante, una de los factores que guió sus principios es que Washington D.C. fue diseñada como una ciudad donde el centro de atención fuera el pueblo o 'reino público.'
Dijo que luego de llegar a la ciudad como CFO, posición que describió como la de un navegador que guía a una nave a su destino, dijo que una de las primeras cosas que hizo fue hablar con los ciudadanos para obtener información.
Al visualizar su labor, Williams dijo que pensaba en Washington D.C. como un reino público, cuyo centro es la confianza en el gobierno y servicios gubernamentales seguros.
Relató que cuando se convirtió en alcalde, las agencias de servicios no contestaban el teléfono o no habían portales ni personas que dieran información.
'A nadie le importaba Washington D.C. y pensaban que era un chiste', dijo.
Al pensar que la ciudad es un 'reino público,' enfocó su estrategia de liderato en tres cosas y delegó las demás. Esta fue restaurar confianza y respeto por la ciudad, restaurar los servicios que ofrecen la ciudad así como proveer una guía para que los ciudadanos la siguieran y 'las finanzas eran una gran parte.'
Williams destacó que el presupuesto hay que mirarlo como un plan de varios años y no de un solo año. Dijo que hay que parear los gastos e ingresos a largo plazo y a corto plazo.
'A menos que lo manejes como algo de varios años, no saldrás del hoyo', destacó.
También el presupuesto tiene que ser transparente y obligar a los oficiales mirar los estados financieros o 'balance sheet'.
Williams dijo que no solo la ciudad necesita un alcalde sino un buen inspector general u oficial financiero que tenga alguna autonomía para monitorear los gastos y detener abusos.
Dijo que no se enfocó en la situación de su relación con el gobierno federal porque 'para que voy a estar gritando por algo que no podía cambiar.'
A modo de ejemplo, el gobierno federal no le permitía imponer impuestos en las propiedades federales que estaban en la ciudad pero entonces solicitó que se transfirieran a la ciudad y eso permitió obtener impuestos a la propiedad.
También se propuso atraer unas 100,000 nuevos habitantes a la ciudad. Todo el mundo le dijo que estaba loco pero lo logró. La ciudad creció por unos 83,000 habitantes en 10 años, lo cual le permitió aumentar los ingresos.
De otra parte, Williams dijo que en muchas ocasiones hay que tomar decisiones que no son populares. Dijo que tuvo que cerrar un hospital pero la gente vio que era para un bien común y ese dinero se usó para ofrecer un programa de servicios de salud a los pobres. 'Cuando yo era CFO tuve que despedir mucha gente…y me escogieron alcalde', dijo.
También sugirió crear un ambiente para los negocios.
'Creo que muchos de estos principios se pueden aplicar a Puerto Rico', dijo al destacar que tiene que haber una política clara para las cosas que se hacen.
Al preguntársele sobre la fórmula que está usando Puerto Rico para balancear de imponer impuestos, medidas de recaudos, recortes de gastos y reorganizar agencias pero sin despedir, Williams dijo a nivel federal se enfocó en eliminar gastos discrecionales cuando en realidad se debe ir detrás del 'el gasto en prestaciones' que es el verdadero problema.
Dijo que no había problemas con no despedir gente pero se tiene que manejar la atrición a largo plazo. 'En vez de reemplazar 10 trabajadores que se fueron, reemplazas tres', dijo.
Al preguntársele sobre la imposición de impuestos en el estado, Williams dijo que la gente quiere ver al gobierno mejorar siempre que se vea mejoras en la economía.
'Está bien si el nuevo ingreso va a nuevas inversiones o mejorar el flujo de efectivo pero si va a financiar operaciones fracasadas, eso es el camino a la perdición', dijo en un aparte con la prensa.
Williams dijo que entiende que el gobierno local está haciendo el esfuerzo de reducir gastos y enderezar las finanzas.
Dejó en manos del liderato del país decidir si desea tener una entidad independiente que vea las finanzas.
Dijo que Puerto Rico debe usar a la diáspora para tratar de que el Congreso vea que es necesario que Puerto Rico sea exitoso.
El exalcalde hizo sus expresiones durante la Conferencia sobre Política Contributiva y Asuntos Fiscales ofrecida por el Colegio de Contadores Públicos Autorizados en un hotel de la capital.