Cierre de clínica de salud mental podría poner en juego tratamiento de niños y adolescentes
El cierre de la Clínica de Niños y Adolescentes de Salud Mental de Río Piedras que, según ASSMCA, corresponde a regulaciones federales, deja sin servicios a más de 700 niños y niñas. Éstos eran tratados por personal altamente especializado bajo tecnicas interdisciplinarias que se desarrollaban a base de sus situaciones psicosociales, cuyo fin era lograr que las necesidades de cada paciente fueran cubiertas de manera integral.
Según explicóLarry Emil AliceaRodríguez, presidente del Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico, el cierre de la clínica puede responder a procesos deotorgaciónde fondos federales o hasta a algunos reglamentos de facturación, pero no toma en cuenta las necesidades familiares y de los menores de edad involucrados en el asunto.
Y es que a pesar de queASSMCAdice que los servicios no se afectarán debido a que los pacientes serán atendidos por empresas privadas, comoAPS, la preocupación llega tras haber pacientes que son tratados psicológicamente tras sufrir patrones de diversos tipos de maltrato y hasta abuso sexual.
'Aparte de presidir el Colegio, llevo años dirigiendo un programa de salud mental que brinda servicios a la población especial de niños/as abusados/assexualmente. Conozco de primera mano la necesidad de salud mental de las personas menores de edad y cómo la calidad de servicios prestados es esencial para minimizar y en la mayoría de los casos eliminar secuelas personales, familiares y sociales. Estas secuelas, son producto de la falta de servicios o de la prestación de servicios basados en prácticasneoliberalesfundamentadas en la filosofía de mercado de brindar el servicio menos costoso para obtener el máximo de ganancias', explicóAliceaRodríguez en un comunicado de prensa.
Añadió que espreocupanteque la calidad de los servicios que se les brindaba en la clínica, que tenía 50 años operando, se vea disminuida, pues asegura que hay literatura profesional que indica que los cambios de servicios de salud mental tienen resultados negativos, sobre todo en menores de edad.
'Éstas familias han hecho un enlace terapéutico con los/as profesionales que brindan servicios en esas facilidades. La decisión de trasladarlos puede tener el efecto de sabotear el tratamiento y servir como gatillo a los síntomas y situaciones relacionados a los problemas y condiciones que allí se tratan. De igual forma, muchas de esas familias han acudido a la Clínica, precisamente porque los servicios de salud mental que han recibido en otras facilidades no les ha funcionado o no han estado disponible con la frecuencia, tiempo e intensidad que tienen las condiciones que presentan esos niños y niñas', expresó.
Asimismo, el trabajador social solicitó que el cierre sea detenido y que se busquen otras opciones aparte de cerrar el lugar, como la creación de comisiones multisectoriales que puedan buscar soluciones inmediatas para garantizar la continuidad de los servicios y, por ende, el mejor estar de los pacientes.
'El gobierno será responsable de cualquier incidente que surja como consecuencia de este cierre. Lejos de cerrar estos servicios, el gobierno debería procurar ampliarlos (…) El derecho humano básico a la salud y salud mental tiene que ser garantizado y nuestro Colegio estará militante para que estos servicios se continúen prestando. Estamos a la disposición de formar esa coalición amplia para buscar alternativas y resolver cualquier conflicto que obstaculice la continuación de esta clínica', concluyó.