Arzobispo de San Juan: padre Carlos Pérez no habla a nombre de la iglesia
'Ya la Inquisición pasó'. Con esas palabras, el arzobispo de San Juan, Roberto González Nieves, le envió un mensaje directo al padre Carlos Perez para que deje la obsesión contra la comunidad LGBTT como ha solicitado la máxima autoridad del Vaticano en Roma: el papa Francisco.
Y, a preguntas de NotiCel, el Monseñor desautorizó al sacerdote Perez a hablar a nombre de la iglesia.
'Yo pienso que las palabras del papa Francisco son muy sabias, debemos de acogerlas con entusiasmo y poner a un lado la obsesión con estos tres temas. Obviamente, sin excluirlos, pero tratarlos de manera muy diferente con un tono de respeto a la dignidad de la persona humana, de acogida amorosa de todo ser humano', fue la primera reacción del Arzobispo metropolitano.
González Nieves recordó que pasó sus primeros años como sacerdote en una parroquia en el sur del Bronx, de Nueva York, en una barriada 'muy pobre', donde la madre María Teresa de Calcuta estableció su primer convento en los Estados Unidos por la pobreza material en la zona.
'A una cuadra de la iglesia habían varios prostíbulos de diferente índole y personas que trabajaban en esos prostíbulos, algunos frecuentaban la casa parroquial para conversar con el sacerdote de turno y, obviamente, yo estuve siete años y vi mucha gente y pude conversar con muchas personas que trabajaban en estos lugares y conocer algo del drama de la angustia de sus vidas. Entonces, entiendo que la entrevista del Papa es una maravilla y es un momento de transición en nuestra pastoral', destacó.
NC: Siendo usted el Arzobispo de San Juan: Usted le pediría al padre Carlos Pérez que deje ya esa obsesión que tiene en contra de la comunidad LGBTT?
'El padre Carlos Pérez es un hombre libre, Dios lo creó libre y a cada uno de nosotros nos corresponde usar nuestra libertad responsablemente y, en ese sentido, ya la Inquisición pasó', sostuvo González Nieves.
'Yo creo, mirando hacia atrás, (la Inquisición) es una tragedia para la iglesia, pero aquí no se va a amordazar a nadie, pero que cada cual utilice su libertad con caridad, con respeto', añadió.
Cuando NotiCel le preguntó que el sacerdote Pérez ha hecho la representación en los medios e, incluso, en la Legislatura de que habla a nombre de la iglesia católica, monseñor González Nieves estableció que las expresiones del cura antigay son a título personal.
'No puedo hablar tan subjetivamente del padre Carlos, pero cuando él se presenta ante la Legislatura, lo hace como ciudadano. A nombre de la iglesia no habla', sostuvo González Nieves cuando este diario digital le preguntó si le va a pedir que siga el mensaje del papa Francisco y deje ya la obsesión por el tema de los homosexuales y sus legítimos reclamos de obtener mayores derechos civiles.
El papa Francisco aseguró recientemente en una entrevista que, aunque la iglesia tiene el derecho de expresar sus opiniones, la institución religiosa no puede 'intervenir espiritualmente' en la vida de las personas homosexuales.
Por su parte, el sacerdote Pérezexplicó a NotiCel que, aunque nunca ha pretendido que se censure la diversidad de opiniones, la comunidad LGBTT no debe confundir la compasión de la Iglesia Católica con la complicidad y manifestó pesar por la 'imposición' de doctrinas sectarias, refiriéndose a las visitas del activista Pedro Julio Serrano a algunas escuelas públicas del país durante las pasadas semanas.
Reacciona líder de la comunidad LGBTT a expresiones del Arzobispo
Mientras tanto, Pedro Julio Serrano vio con buenos ojos las expresiones que hizo el arzobispo de San Juan, aunque lamentó que este tono conciliador no se hubiese dado antes. También insistió para que sacerdotes y miembros de la Iglesia Católica escuchen las palabras, tanto del Monseñor Roberto González Nieves como del Papa Francisco.
'La feligresía católica y llevaba marcando ese tono mucho antes de que el Papa y el arzobispo hicieran expresiones. Ellos están respondiendo a la feligresía, en vez de mandar la pauta. Este es un llamado de la iglesia (…) Le doy la bienvenida al arzobispo que nosotros conocíamos y no el que vimos en los otros meses, que se tiró a la derecha, con un discurso moralista y en contra de la comunidad LGBTT', expresó a NotiCel mientras definía como 'contundentes' las palabras de ambos líderes católicos.
Exhortó, además, a que el sacerdote Carlos Pérez no continúe con los ataques personales puesto que, según él, nunca se le ha faltado el respeto dentro de la comunidad LGBTT.
'Que dejen los ataques personales en mi contra. Una persona en su posición no utiliza su acceso en los medios para atacar de manera injuriosa a otra persona, sea quien sea. Yo siempre lo he respetado, nunca le he faltado el respeto. Que entienda que sus dos máximos jefes, el arzobispo y el Papa Francisco, le dijeron que ya basta. Se acabó el tratar a las personas de la comunidad LGBTT con irrespeto e intolerancia', sostuvo.
El activista dijo que la misma Carta de San Pablo que el sacerdote Pérez usa para señalar a la comunidad LGBTT debe servirle para autoevaluarse, ya que en la misma también se habla del pecado de ser arrogante e insolente. Estas características, a juicio de Serrano, han sido puestas en acción por Pérez al expresarse contra los homosexuales.
'Si fuéramos a aplicar la Carta de San Pablo al sacerdote Carlos Pérez, también pecaría. Tiene que autoevaluarse con el libro que él sigue, que es la Biblia', dijo para luego añadir que debe enfocarse más en realizar su trabajo en la Iglesia con 'compasión y sinceridad'.
Asimismo, Serrano aseguró que a pesar de que las recientes expresiones provenientes de la Iglesia Católica son buenas noticias, queda un largo camino por recorrer. En esto incluyó el rol de la mujer y hasta su potestad para ser sacerdotisas.
'Yo creo que no hay un cambio de política, aunque tiene que eventualmente cambiar. El pecado no es la homosexualidad, el pecado es la homofobia y el discrimen. La línea del papa y el arzobispo va por la línea de alejar el discrimen y eso es un cambio de tono bienvenido, pero quedan otros asuntos como el de que las mujeres puedan llegar a ser sacerdotisas, que tengan mayor rol en la iglesias', comentó.