El juez federal Jose A. Fuste dijo mediante orden que va a dejar a un lado el resolver las mociones de desestimación y sanciones que están pendientes en la demanda contra Doral Financial por el asesinato de su exvicepresidente, Maurice Spagnoletti.

La posposición que decretó el juez será hasta que las partes puedan realizar deposiciones a testigos, por lo cual estableció un plazo hasta el 7 de octubre para que las partes digan a quién quieren deponer.

Para el juez, es necesario que las partes realicen 'un descubrimiento de prueba básico' antes de disponer de las mociones. Esto implica que tanto la viuda de Spagnoletti, la demandante Marisa Spagnoletti, como los principales ejecutivos de Doral, su presidente Glen Wakeman y su jefe de Legal Enrique Ubarri Baragano, podrían tener que contestar preguntas bajo juramento sobre las alegaciones.

La viuda e hija de Spagnoletti sostienen que estos ejecutivos de Doral, y otros, están involucrados en el asesinato por encargo del ejecutivo, un evento que también está bajo investigación del Negociado Federal de Investigaciones (FBI). De hecho, los abogados de la familia se han reunido con la Fiscalía Federal sobre este caso.

La institución bancaria, así como Wakeman y Ubarri, pidieron la desestimación del pleito alegando que no contiene hechos que puedan probar la vinculación de los ejecutivos con el asesinato, y sometieron una moción separada pidiendo sanciones para los abogados de los demandantes.

Pero en una riposta, los demandantes dijeron al tribunal que los ejecutivos no están en el pleito de manera indirecta o nominal, sino porque 'estuvieron personalmente involucrados y concientes de la situación de Spagnoletti, de su descubrimiento de fraude (en el banco), y de las amenazas hechas en contra de su vida'.

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