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Gobierno intentará convencer a Cruz Roja Americana de no despedir empleados

Tras recordar que es un donante de sangre habitual, el gobernador Alejandro García Padilla aseguró que su administración tratará de que la Cruz Roja Americana revierta una determinación de dejar de recolectar sangre en la isla, lo que redundará en el despido de 200 empleados a partir de octubre.

'Fue una decisión que se hizo en los Estados Unidos que no era conocida por el directorio en Puerto Rico de la Cruz Roja y ya el asesor de asuntos federales, Emiliano Trigo, está trabajando directamente con la Presidenta de la Cruz Rojas en los Estados Unidos y vamos a hacer todo lo posible para que no se pierdan esos empleos y para que no se pierda el servicio', dijo García Padilla en rueda de prensa.

El primer ejecutivo aseguró que no habrá problemas con el suministro de sangre porque se importará desde la Cruz Roja Americana en los Estados Unidos.

'Hay que aclarar que el suministro de sangre no se afecta. Lo que ellos están diciendo es que no van a colectarla en Puerto Rico. Todos los que donamos sangre, yo soy donante frecuente de la Cruz Roja, tenemos otros bancos de sangre en Puerto Rico, es decir tenemos un banco de sangre del gobierno de Puerto Rico en el Centro Médico, tenemos bancos de sangre en distintos hospitales. Por lo tanto, la donación puertorriqueña, lo que nosotros donamos puede o va a tener los receptores necesarios', destacó el mandatario.

'Tenemos que evitar que esos empleos se nos vayan. Tan pronto advenimos en conocimiento, estamos trabajando directamente con la Cruz Roja de los Estados Unidos para evitar que se pierdan esos 200 empleos', insistió.

Actualmente, el asesor laboral de La Fortaleza, Arturo Ríos Escribano, se encuentra reunido en la Mansión Ejecutiva con el director de la Cruz Roja local, Antonio de Vera, discutiendo posibles acciones para atender esta situación.

Por su parte, el Secretario del Departamento de Salud, Francisco Joglar Pesquera, recordó a la población que el País cuenta con un Banco de Sangre del Estado hace cinco años, que brinda servicios a los hospitales públicos del País y el cual cuenta con la capacidad de proveer abastos de sangre para los hospitales privados.

'Lamento genuinamente la situación que están atravesando las personas que serán cesanteadas. No obstante, quiero enfatizar en que los ciudadanos deben estar tranquilos. Diariamente se reciben donantes en el Banco de Sangre de Puerto Rico ubicado en Centro Médico. Desde que comenzó operaciones ha sido el único que suple sangre y plaquetas a las principales instituciones públicas de Salud de nuestra Isla. Actualmente, contamos con más de 70 mil donantes. Entendemos podremos atender la insuficiencia en servicios que enfrenten las instituciones privadas de la Isla como resultado del anuncio emitido por la Cruz Roja de PR ', subrayó el titular de Salud.

El funcionario de Salud adelantó que se encuentra en conversaciones con la Directora de la Administración de Servicios Médicos (ASEM), Ana Rius, para viabilizar el reclutamiento de parte del personal que queda desempleado. 'Estamos auscultando qué cantidad de profesionales especializados de la Cruz Roja podemos reclutar para ampliar los servicios del Banco', informó el galeno.

Vera anunció esta mañana que los Centros de Recolección de Sangre en Puerto Rico cesarán operaciones este próximo mes de octubre luego de 52 años de trabajo en la Isla.

El cierre de esta división ocasionará al menos 200 despidos.Vera informó durante una entrevista para WKAQ que la noticia la recibió del actual vicepresidente de la Cruz Roja. Según le indicaron, la organización argumentó que pueden cumplir con las necesidades de Puerto Rico desde Estados Unidos.

Entre una de las razones para el cierre es que hace tres años, por ley, se estableció un nuevo sistema computadorizado de etiquetas que no se trajo al País. Se le había indicado a Vera que ese sistema llegaría a la Isla, pero la gerencia de la Cruz Roja decidió entonces descontinuar las operaciones.

Vera defendió su labor, la que lleva realizando desde hace 14 años, cuando en 1999 comenzó como Director ejecutivo a cargo de los Servicios Biomédicos para Puerto Rico y el Caribe.

Explicó en la entrevista que en los primeros tres años de su gestión logró que Puerto Rico subiera al puesto número uno, luego de años en el puesto número 36 y ser considerada una de las peores regiones del sistema de la Cruz Roja. Añadió que esto se logró al cambiar el sistema de donación de sangre de uno de reposición a uno voluntario.

Desde el mes de octubre, la sangre será enviada a la Isla desde Estados Unidos y en la Isla sólo quedará el centro de distribución.