Declaran que esposa del exjuez Irizarry era maltratada sicológicamente por éste
Georgina Ortiz Ortiz, la difunta esposa del ex juez del Tribunal Supremo Carlos Irizarry Yunque, presuntamente era maltratada sicológicamente por este y se sentía engañada ya que el letrado no le advirtió que no podía tener relaciones sexuales antes de que se casaran en 1996.
Así lo declaró el lunes, en la vista preliminar que se conduce en contra de la empleada doméstica, Aida de los Santos Pineda, por el asesinato de Ortiz, quien fuera el entrenador su personal en vida, Iván Marrero, de 38 años, según difunde Primera Hora. Marrero indicó que Ortiz tomaba pastillas por depresión y que estaba a punto de dejar a su esposo. También sostuvo que nunca presenció problemas entre su clienta y De los Santos.
Marrero dijo que conocía el sentir de Ortiz porque ella misma se lo expresó y porque era de conocimiento general entre los parroquianos del gimnasio del que era clienta. La alegada impotencia sexual de Irizarry Yunqué respondía a una operación a la que se había sometido, sostuvo el entrenador, pero la Fiscalía objetó las declaraciones y no se profundizó más en el asunto.
'No hay intención' reclama defensa de De los Santos
De otra parte, durante la vista, la defensa de De los Santos Pineda se presentó en la Sala 605 del Centro Judicial de San Juan y le reclamó a la jueza, Elizabeth Linares Santiago, que no hubo intención alguna de su cliente de matar aOrtiz.
Bajo esa premisa, los abogados Lucille Borges Capó y Aaron Fernández, se ampararon en la hipótesis de que, por no existir intención alguna, De los Santos no asesinó a Ortiz en hechos ocurridos el 17 de agosto de 2010 en el Condominio Laguna Terrace en Condado, San Juan.
La representación de la acusada basó su petición en el supuesto hecho de que el pasado jueves, la corte puso en entredicho el asunto del posible robo de prendas de la occisa como móvil de su asesinato.
Aunque fiscalía cuestionó la petición de defensa y la jueza no pareció muy convencida con el argumento de la alegada prueba exculpatoria, Borges Capó expresó que insistirá en su argumento de que se descarte el asunto de robo de prendas como móvil del crimen y que el Estado pruebe la intención.
'Se presento el jueves en sala un asunto sobre unas alegadas prendas y ese asunto se quedó sobre el tintero y llegó al análisis, la argumentación de diferentes posibilidades. A mi representada se le imputa un delito que requiere intención específica. Nadie le hace la muerte a otro ser humano sin una intención, a menos que ocurra bajo la modalidad de negligencia. El Ministerio Público descartó como móvil el robo. Por eso es que no hay una denuncia de robo domiciliario, no hay una querella de apropiación ilegal, ni anterior', dijo la abogada a miembros de la prensa durante un receso de la vista preliminar celebrada en corte.
Además de elevar el asunto de las prendas como fundamento para solicitar el recurso de prueba exculpatoria, la defensa también hizo referencia a un alegado estudio patológico documentado por el licenciado Fernández.
Según la defensa, este informe arroja información que también apunta a posible prueba exculpatoria. Alegan los abogados, que la herida encontrada en la occisa no pudo haber sido realizada por la acusada.
'Bajo el análisis de esa prueba exculpatoria, la investigación que hemos realizado, el licenciado Aaron Fernández trajo a colación que de ese informa patológico surge prueba exculpatoria para nuestra representada', añadió la abogada de defensa.
Esta segunda petición de prueba exculpatoria tampoco fue aceptada por la jueza, quien le indicó a la defensa que esperaran a que la corte citara un perito forense para testificar, y permitirle así a los abogados montar su contrainterrogatorio alrededor de la posible evidencia patológica.
Sin embargo, la defensa insistió en la alegada contundencia de sus pruebas patológicas.
De hecho, previo al inicio de la vista, Borges sugirió que la razón por la cual De los Santos continúa viva es debido a que sabe técnicas de defensa personal.
A tono con este planteamiento, NotiCel le preguntó a Borges a qué se refería con este argumento de la defensa personal. No obstante, la abogada indicó que dicho argumento sería profundizado en la vista.
Hasta el momento, la vista de hoy ha contado con el desfile de los testigos de fiscalía, Pablo Rodríguez Quiñones y Rafael Delgado. El primero de éstos laboraba como oficial de seguridad del condominio el día del asesinato y admitió conocer a la acusada, pero como Carmen Pichardo, otro nombre con el que se identificaba De los Santos por su estatus migratorio.
En el caso de Delgado, éste se presume que entró a la residencia de Ortiz el día de los hechos, para prestar servicios en representación de la empresa mata insectos conocida como 'Oliver Exterminating'.
Ambos testigos dijeron haber visto a De los Santos el día de los hechos.
Dos testigos adicionales comparecieron a la vista. Uno de ellos es el ex entrenador personal de Ortiz, Iván Marrero.