Rechaza el PIP que la Marina limpie en Vieques
María de Lourdes Santiago, Denis Márquez, candidatos al Senado y a la Cámara por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), y Juan Mercado, aspirante a comisionado residente, rechazaron el jueves la propuesta de la Marina para limpiar en uno de los lugares contaminados en el área oeste de Vieques.
'La Marina ha anunciado que su alternativa preferida es cercar el lugar que debería ser objeto de limpieza y remoción de explosivos y prohibir su acceso al mismo de forma permanente. Esta es la zona en la que se detonaban, en 16 trincheras cavadas para ese fin, aquellas municiones y explosivos expirados, sobrantes o dañados. Algunos explosivos eran lanzados fuera de la trinchera, lo que causó su dispersión a un diámetro de aproximadamente media milla', dijo Santiago.
Según la exlegisladora, la Marina ha indicado que su único objetivo es evitar responsabilidad legal por los explosivos, y que se inclinan a las alternativas más baratas posibles para cumplir ese objetivo mínimo.
'Para nosotros, esa es una alternativa completamente inaceptable, pues la responsabilidad real de la Marina es procurar la limpieza más rigurosa posible del terreno que ellos contaminaron. Dejar bombas regadas en la zona no es un método de limpieza apropiado', señaló.
Por su parte, Márquez indicó que el gran peligro es que la propuesta establezca además un precedente, y que llegado el momento, la Marina se niegue a limpiar la zona más afectada, que es el área este, lo que impediría todo uso futuro de esas 8,000 cuerdas, más allá de perpetuar la designación de refugio de vida silvestre.
Mientras tanto, Mercado expresó que 'la alternativa que respalda el Partido Independentista para la limpieza de las casi 300 cuerdas que quedan sin atender en el oeste es la propuesta por miembros del Restoration Advisory Board, que consiste en la limpieza completa del área hasta al menos dos pies de profundidad. Debe ser función del comisionado residente hacerse eco de esta propuesta, y eventualmente promover un cambio de los usos de terreno en partes del este, que al momento, por ley federal, están designados como refugio de vida silvestre, no por su real importancia ecológica, sino por conveniencia política'.