Las autoridades dominicanas piensan que Erika Mutt Cintrón y Juan Carlos Cerezo Rivera, los dos puertorriqueños arrestados el domingo mientras intentaban introducir 194 bolsitas de droga y que totalizaban 3 kilos de cocaína, en un vuelo desde la República Dominicana a Puerto Rico, llevaban hace un tiempo dentro del negocio del narcotráfico en el vecino país.

Roberto Lebrón, portavoz de la Dirección Nacional de Control de Drogas, afirmó en entrevista telefónica con NotiCel que 'por la forma que ellos vivían como estudiantes en San Pedro de Macoris, entendemos que hace tiempo estaban en el negocio'.

Sin embargo, las autoridades descartan que la pareja de esposostuvieran alguna relación con Vincent Amponsah, el ghanés también detenido por intentar traficar 60 cápsulas de droga a Madrid, España desde Santo Domingo.

Por el momento, los puertorriqueños se encuentran bajo reclusión preventiva en la cárcel Najayo, que está dividida para hombres y mujeres.

Lebrón sostuvo que la cárcel está ubicada a 32 kilómetros al oeste de Santo Domingo.

El Ministerio Público tiene hasta tres meses para presentar la prueba para que el juez pueda evaluar el caso y emitir una sentencia.

El funcionario explicó que el juez tiene ante su consideración dictar sentencia para juicio o un no ha lugar; es decir, que se puedan caer los cargos.

Sin embargo, observó que es probable que los puertorriqueños vayan a juicio porque la droga fue encontrada adherida a su cuerpo en las partes íntimas.

Lebrón precisó que Mutt Cintrón y Cerezo Rivera podrían exponerse a una pena de sobre 10 años de cárcel.

Entretanto, el miércoles, David Mutt, el padre de Mutt Cintrón, se mostró agradecido por el aopoyo que ha recibido de familiares y amigos de su hija.

'Yo voy a hacer un comentario. Voy a expresar mi más sincero agradecimiento a las personas que han estado haciendo expresiones de buena voluntad. También quiero pedir perdón por el agravio, tanto a mis hermanos dominicanos como mis hermanos puertorriqueños', dijo Mutt a El Nuevo Día.