En entredicho la reputación de la Policía
En medio de los señalamientos en torno a la manipulación de las estadísticas del crimen, la imagen de la Policía de Puerto Rico se ve aun más afectada cuando a dos oficiales se les acusó de la comisión de delitos este fin de semana y otro fue expulsado de la uniformada por hacer mal uso del equipo a su cargo.
Luis Daniel López Guzmán, adscrito al Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Caguas fue acusado de escalamiento y robo domiciliario luego de que intentara robar la residencia un policía retirado. El agente intentó engañar a los policías municipales y estatales que se presentaron a la residencia en la Urbanización Villas del Rey en Caguas identificándose como policía y diciendo que estaba en persecución de los escaladores.
López Guzmán quien además de la posibilidad de ser condenado a prisión por los hechos en los que fue sorprendido, es casi seguro que también sea expulsado de la Policía.
'No se puede jugar en los dos equipos' señaló Carlos Morales, presidente de la Corporación Organizada de Policía y Seguridad (COPS), refiriéndose a la conducta de López Guzmán, quien está afiliado a dicha organización.
'De seguro será expulsado, y me da mucho coraje porque esta persona no representa a los demás agentes de la Policía,' dijo Morales.
En un caso similar, el agente Marcos Crispín Díaz, adscrito a la Región Policial de Carolina, fue arrestado y se le presentaron cargos por violaciones a la Ley de Armas y de Substancias Controladas luego de que en una intervención vehicular se ocuparan drogas y una pistola en su automóvil el viernes en la tarde.
De acuerdo con el informe de la Policía, agentes del Cuartel de Río Grande encontraron en el carro de Crispín Díaz 10 pastillas de éxtasis, tres cigarrillos y picadura de marihuana, dos manoplas y una pistola calibre .40, la cual no estaba autorizado a poseer.
A estos casos se añade la expulsión del agente Harold Alexander Ortiz, quien fuera expulsado de la Policía por el propio Superintendente Emilio Díaz Colón, por el uso indebido del equipo a su cargo.
Ortiz fue el policía que, a través del sistema de altoparlantes de su patrulla, le gritó a Díaz Colón que renunciara a su posición de Superintendente, mientras éste asistía al velorio del Policía Abimael Castro Berrocales en Mayagüez el pasado mes de enero.
Para el presidente de COPS, aunque Ortiz tiene el derecho de apelar la expulsión, e incluso demandar en los tribunales a la uniformada, 'eso se le va a hacer bien cuesta arriba'.
'Puede ser que tenga chance [de apelar o demandar] pero se le va a hacer bien cuesta arriba el proceso porque la evidencia de que cometió la falta está ahí… y hay testigos', dijo Morales.
De acuerdo con Morales, levantar como defensa el derecho a la libertad de expresión en el caso de la expulsión de Ortiz no sería efectivo porque a él no lo expulsan por sus expresiones ['Renuncia!', dirigiéndose a Díaz Colón desde el altoparlante de su patrulla], sino por haber usado el equipo de la Policía para hacer la expresión.
'El reglamento es claro en ese sentido', dijo Morales refiriéndose a la prohibición expresa del uso de equipo de la Policía para propósitos distintos a los propios de la agencia.
Morales recordó además que existen otras querellas administrativas en contra de Ortiz que decididamente debieron ser tomadas en cuanta el momento de expulsarlo de la Policía.