PIP: la violencia es culpa del status colonial
El candidato independentista a la comisaría residente, Juan Manuel Mercado, denominó como trágicas las recientes expresiones del gobernador y presidente del Partido Nuevo Progresista (PNP) y del candidato del Partido Popular (PPD), Rafael Cox Alomar, en torno a la escalada en la delincuencia que se ha dado con el comienzo del año.
'Las expresiones de Fortuño y Cox son trágicas, pues ambas pierden de perspectiva el problema del control de la delincuencia en el país. Por un lado el primero se lamenta de lo que ‘no pudo ser…' en cuanto a la falta de importancia que ha dado el gobierno federal al asunto y el otro, Cox Alomar, se lamenta porque no se siguieron las instrucciones 'del amo', en torno al hecho de que no se hizo una 'cumbre' según lo dijera el informe de Casa Blanca. En ese sentido las posiciones de Fortuño y Cox son igualmente colonialistas, como si de portavoces de partidos siameses se tratara', dijo en un comunicado.
Sobre la seguridad, indicó que más que lamentarse por su fracaso en cuanto a ese renglón, Fortuño debe de asumir su responsabilidad y entender que el asunto es uno que requiere un enfoque multidireccional, como ha planteado el candidato a la gobernación del PIP, Juan Dalmau.
'Igualmente, es preciso que el gobernador y su comisionado residente denuncien que el desastre de seguridad en Puerto Rico está directamente relacionado a la acción y omisión de un gobierno federal con control absoluto sobre nuestro territorio nacional. Algo, que pretenden ocultar tanto los colonialistas azules como los rojos y es por eso que Cox tristemente ha advertido el rumbo de la propuesta del Partido Popular: acatar ciegamente las instrucciones del amo americano', sentenció.
En torno a la propuesta de Cox de dar seguimiento al informe de Casa Blanca y hacer una 'Cumbre de Seguridad', Mercado dijo que es imposible que los puertorriqueños sigamos bajando la cabeza como esclavos ante los designios del americano.
'De todas maneras, no hay cumbre que arregle esto a menos que los puertorriqueños le pongamos el cascabel al gato y las cantemos como las vemos: el problema de seguridad en Puerto Rico es uno íntimamente ligado al estatus colonial de la Isla. Sólo resolviendo el problema del estatus podremos implementar por decisión propia, entre muchas otras potenciales iniciativas, terminar con la importación y venta de armas y municiones, realizar inspecciones más estrictas a furgones y equipajes como disuasivo para que nos dejen de usar de puente o elaborar una estrategia salubrista integral para atender la narco dependencia entre los nuestros, producto de esas mismas importaciones desatendidas', concluyó el líder independentista.