En momentos en que se evalúa un proyecto de ley para reorganizar el Departamento de Justicia, surgen denuncias de que en esa agencia no se respeta la jerarquía de puestos, ya que se coloca a fiscales I y II a supervisar a otros que llevan más años en esa dependencia gubernamental.

'Hoy en día no se guarda la jerarquía en el Departamento y se da la anomalía de que fiscales I o II están supervisando a fiscales de mayor experiencia y conocimiento. Han antepuesto sus preferencias político partidista al beneficio del pueblo. Es irónico que la Ley Orgánica del Departamento de Justicia establezca las funciones del Fiscal Especial General y que sea este Departamento que las viole', sostuvo a NotiCel una fuente que ocupa un cargo de fiscal general especial.

'El Departamento de Justicia siempre ha tenido fiscales generales, cuya función principal es la de supervisión, dada su experiencia y compromiso. La única razón que entiendo que motiva a eliminar esta clasificación es que los actuales Fiscales Especiales Generales fueron nombrados por Sila María Calderón, excepto el fiscal que investigó el caso de Filiberto Ojeda Ríos y creo que otro fiscal más que nombró Aníbal Acevedo Vilá', anadió la fuente.

Se refirió a la reorganización que el Senado propone para Justicia y que busca crear, entre otras posiciones, la de fiscal IV, según confirmó recientemente el presidente de la Comisión de Gobierno del Senado, Carmelo Ríos.

La presidenta de la Asociación de Fiscales, Mibari Rivera, renominada el viernes al cargo de fiscal II, reconoció que la situación denunciada 'sí ocurre', pero destacó que puede pasar que un fiscal I tenga la experiencia necesaria para ocupar un puesto de supervisión debido a que los nombramientos de esos funcionarios son por un término de 12 años.

Mencionó, como ejemplo, que en el caso del sucesor del fiscal general Obdulio Meléndez, quien era fiscal de distrito en Fajardo, ahora hay un fiscal II al mando de esa región.

Reconoció que ha habido cambios para relocalizar a los fiscales en áreas cercanas a sus residencias, pero aseguró que no se hizo por favoritismo.

'No utilizaría la palabra favoritismo, pero sí ocurre que haya fiscales I supervisando fiscales II o III', sostuvo Rivera en entrevista telefónica con NotiCel.

Para Rivera, el proyecto de ley para crear nuevas posiciones en Justicia es necesario porque en la actualidad hay 300 fiscales para atender a una población de más de tres millones de habitantes.

Destacó que en la actualidad hay 14 puestos de fiscal III, 14 de fiscales de distrito y 19 de fiscales generales especiales, y en su caso no pudo ser nombrada a un puesto de fiscal III porque no había vacantes en esa categoría.

'Sí entiendo que es necesaria la creación de estos nuevos puestos porque la ley actualmente no permite que todos los fiscales tengan oportunidad de crecer profesionalmente porque no existen las posiciones necesarias', señaló Rivera.

Cuando NotiCel le apuntó que la creación de nuevas plazas no garantiza que los nombramientos se hagan por mérito y años de experiencia, debido a que las designaciones las hace el gobernante de turno a base de su confianza en el candidato al puesto, respondió: 'todo es posible'.

'Definitivamente, eso es correcto, pero si se crean esas 60 plazas nuevas, se les daría más oportunidad de crecimiento profesional y de ascenso a fiscales que lo merecen por mérito', dijo la funcionaria con 19 años en la agencia.

El Senado evalúa la reorganización del Departamento de Justicia y de la Policía para alegadamente convertirlas en entidades más ágiles para combatir la delincuencia.

El senador Ríos indicó que por ley se creará el cargo de jefe de fiscales, la posición de fiscal 4 y un secretario auxiliar de casos civiles para que el Secretario de Justicia sólo se dedique a atender los casos criminales. Además, se creará una procuraduría de menores, así como una división de investigaciones criminales que tendría funciones diferentes a las que realiza el Negociado de Investigaciones Especiales (NIE).

El legislador opinó que el NIE no debe estar adscrito a Justicia, sino a la Policía, como ocurre en otras jurisdicciones estadounidenses.

Para el senador, la reorganización de Justicia no implicará más burocracia. A su juicio, la burocracia la crea la centralización del poder en el titular de Justicia como ocurría bajo la incumbencia de Roberto Sánchez Ramos.

Detalló que el fiscal 4 va a tener mayor poder decisional y no tendría que consultar con el Secretario de Justicia para la radicación de un caso.

'Esto va a agilizar las investigaciones y el procesamiento de los criminales', argumentó.