Se van todos los colegios
La serie de medidas radicadas el lunes para eliminar la colegiación compulsoria en profesiones como contador público autorizado y enfermeras, y que NotiCel reseñó en exclusiva, es sólo el comienzo. Todos los demás colegios, incluyendo arquitectos, ingenieros, trabajadores sociales y médicos están en la mira para ser 'descolegiados'.
La representante novoprogresista Liza Fernández lo confirmó así a la vez que dejó espacio para que, en los procesos de vistas públicas que iniciarían la próxima sesión ordinaria, cada colegio demuestre que merece permanecer vivo por algún 'interés apremiante del Estado'. Advirtió que, hasta ahora, su equipo de trabajo no ha encontrado ningún colegio profesional que merezca sobrevivir por esta razón. Una de las claves es que, si el colegio ya tiene una junta examinadora, entonces la intención legislativa es eliminarlo porque entienden que la junta sería el ente que regularía la profesión.
Ante señalamientos del Consejo Interdisciplinario de Colegios y Asociaciones Profesionales de Puerto Rico (Cicap) a NotiCel de que las juntas están desmanteladas por falta de personal y que están ejecutando deficientemente las reválidas y la emisión de licencias, Fernández dijo que en las vistas públicas constatarían eso y corregirían buscando asignaciones presupuestarias. Pero advirtió que ese problema de las juntas no lo resuelven los colegios ahora porque los colegios no están autorizados a administrar reválidas ni emitir licencias.
La más reciente reacción a la publicación de NotiCel fue del Colegio de Contadores Públicos Autorizados (CPA), cuyo presidente, Rubén Rodríguez, señaló que 'eliminar la colegiación compulsoria tendría un efecto detrimental en la calidad de vida de muchos puertorriqueños, en la estabilidad del país y en la calidad de los servicios que las clases profesionales le brindan a nuestros conciudadanos'. 'No entendemos cuál es el problema que representa para unos pocos la colegiación compulsoria', añadió.
'Nosotros no estamos en contra de los colegios', aseguró Fernández al ilustrar que lo que buscan los proyectos de ley no es eliminar a los colegios sino abrir espacio a que surjan otras entidades que agrupen a los profesionales para que se desarrolle una competencia entre entidades que redunde en beneficios para los profesionales. 'La competencia es saludable', acotó.
Los proyectos de ley están basados en una cita del Tribunal Supremo que no tiene ningún peso legal porque sale de la resolución con la que ese foro despachó, sin atender en los méritos, la controversia del Colegio de Abogados. Fernández lo admitió pero defendió que se usó por su poder 'persuasivo'.
'Es insólito que simplemete porque tú dejaste de pagar una cuota a un colegio, que es un grupo, pues que tú no puedas ejercer tu profesión', dijo al explicar que uno de los propósitos de eliminar la colegiación compulsoria es evitar que, después de muchos años de estudio, sean elementos como el pago de una cuota el que determinen si alguien puede practicar o no una profesión.
Fernández reconoció que el efecto de las medidas también será dejar sin una sola voz a las distintas profesiones, pero lo vió como un resultado positivo. 'Ya no va a ser una sola voz (defendiendo la profesión), van a ser varias', reaccionó.
'(Los colegios) se han convertido en clubes sociales para hacer convenciones anuales, o cada cierto tiempo, y para tener una elite de los miembros de las juntas directivas', resumió la legisladora.